Uno de los fundadores de La Oreja de Van Gogh, Pablo Benegas, habla sobre el grupo: 'No éramos conscientes'

Ahora ya no hay dudas, ya no hay más especulación, Amaia Montero vuelve a La Oreja de Van Gogh. Y sí, la reciente noticia que daba Javi Nieves en su programa de 'Cadena 100' de que el guitarrista, compositor y uno de los fundadores de la banda, Pablo Benegas, abandonaba el grupo, también se ha confirmado.

Pablo Benegas deja La Oreja de Van Gogh

Y haciendo repaso por las diferentes declaraciones públicas de Pablo, para ver si encontrábamos alguna intervención en la que pudiéramos hacernos una idea del porqué del presunto rifirrafe entre Benegas y Montero (de ahí que cuando ella ha vuelto, él decidiera marchar), en su lugar hemos hallado una entrevista del año pasado en la que Laura García Higueras, periodista de 'ElDiario.es', le pregunta sobre cómo llega Amaia a La Oreja de Van Gogh.

Lo fuerte es que Pablo es el 'culpable' de que Amaia llegara a formar parte de la banda, después de que coincidiera con ella en una cena y le dijera que tenía un grupo con sus amigos al que le faltaba la cantante: "Y ella me dijo que siempre le había gustado cantar".

Aunque no le gusta decir que él es el responsable de que Amaia entrara a LODVG, sí reconoce que fue él quien le propuso de hacer una prueba y posteriormente formar parte del grupo. Aunque no fue nada fácil convencerla.

¿Cómo fueron los inicios de Amaia Montero en LODVG?

Recuerda que Amaia cantó en el mismo bar una canción a cappella, eso sí, después de pedir que le atenuaran las luces porque le daba mucha vergüenza, y Pablo también recuerda como aquel momento fue "muy emocionante, muy muy emocionante".

Prácticamente desde ese instante tuvo claro que Montero tenía que ser la cantante de la banda, pero hasta conseguir que decidiera involucrarse, Benegas tuvo que insistir hasta en tres ocasiones: "Me costó tres llamadas. Le hacía gestos a su madre de que no se iba a poner, y doña Pilar ahí manejó la situación muy bien y a la tercera insistí, se puso y bueno...", el resto es historia, ya acabamos nosotras la frase.

Es en ese momento de la entrevista cuando Pablo hace una reflexión que puede extrapolarse a cualquier cosa de la vida y es realmente cierta, y es que "muchas veces estamos muy cerca de que NO pasen cosas maravillosas, por nada pudo no haber pasado nada de lo que vino después", expresa el compositor, haciendo referencia a que si quizá no hubiese insistido o Amaia dado el brazo a torcer, La Oreja de Van Gogh nunca hubiese existido o al menos no hubiese sido el fenómeno en el que se ha acabado convirtiendo.

¿Cuál fue el primer concierto y primera maqueta de La Oreja de Van Gogh?

Sobre lo que supuso la ya sí definitiva entrada de la vocalista a la banda, Pablo tiene claro que marcó un antes y un después: "Fue muy emocionante escuchar a Amaia cantar en el local ese horroroso, sucio y húmedo que teníamos... de repente se llenó de luz", desvela el guitarrista a Laura.

Ya con la banda al completo, llegaba el momento de ponerle el nombre. Y Pablo, aunque no recuerda quién fue el que dijo La Oreja de Van Gogh, sí cree que es un buen ejemplo "de que no éramos conscientes de lo que iba a pasar después". Asegura que si les llegan a decir todo lo que pasaría en los años posteriores hubieran puesto otro nombre, "pero como en aquel momento lo único que queríamos era divertirnos tocando juntos, pues por eso le pusimos La Oreja de Van Gogh".

Entonces llegó el momento del primer concierto, allá por 1996, un concierto "muy especial, lleno de amigos y familiares", y que fue la primera o de las primeras veces que se sintieron como una banda al completo, con su vocalista, su maqueta...

Eso sí, esa primera maqueta la presentaron a un concurso de Los 40 Principales, y Pablo recuerda como "no hicieron ni caso" a esa maqueta aunque al contrario de enfadarse cree que solo reafirma el buen criterio del concurso: "Porque nuestra primera maqueta era infumable".

Amaia regresa al grupo 17 años después

Viendo como hablaba Pablo Benegas de Amaia Montero hace apenas un año atrás sorprende que ahora, tras 17 años, Amaia vuelve a La Oreja de Van Gogh y él haya decidido marcharse. Es común que en grupos de trabajo, como una banda, a veces haya roces, diferentes ideas, puntos de vista... pero parece que aquí hay algo más que no hemos sabido ver o no nos han dejado ver.