Anabel Pantoja, a lágrima viva al enterarse del arresto (de mentirijilla) de Kiko Rivera

Anabel Pantoja lleva unas semanas bastante difíciles que empezaron con el ingreso de su hija y siguieron cuando el Hospital Materno Infantil de Gran Canaria informaba sobre posibles lesiones en la pequeña Alma (su hija), lo que llevó a la apertura de diligencias judiciales el pasado 21 de enero contra ella y David Rodríguez. Ahora parece que la cosa se ha calmado un poco más pero Kiko Rivera aparecía en escena para alterar de nuevo a su prima con una bromita de nada que la hacía llorar a lágrima viva.

Kiko Rivera y la llamada de la policía

El hijo de Isabel Pantoja se encontraba en un show de humor cuando los humoristas Aguilera y Maní decidían sacarlo al escenario para ser cómplice de una broma. Los chicos le daban varias opciones para hacer una llamada telefónica de mentira: su madre, su hermana o su prima. Obviamente y después de un poco de vacile Kiko se decantaba por Anabel Pantoja a quién llamaba muy preocupado por un altercado que supuestamente había sufrido en la carretera.

El hijo de Isabel Pantoja telefoneaba a su prima, que estaría tranquilamente en su casa de Gran Canaria, para decirle que había tenido un altercado con la policía en la carretera de que va de Sevilla a Cádiz. Los humoristas no paraban de decir cosas sin sentido y Anabel se ponía nerviosa por momentos sin entender nada. Finalmente, acaba llorando y cuando David Rodríguez la ve y escucha la conversación le dice que se trata de una broma. ¡Qué mal rato!

"DOMINGO NOCHE, ME LLAMA ESTE SEÑOR PARA DECIRME QUE TIENE UN PROBLEMA EN LA CARRETERA. A MÍ CASI ME DA ALGO PENSANDO QUE LE HABÍA PASADO ALGO, Y DESPUÉS EL POLICÍA HABLÁNDOME COSAS EXTRAÑAS", dice Anabel en sus 'stories'. "Menos mal que David me escuchó llorando en el cuarto y me dijo que eran unos gaditanos con mucho arte".

El vídeo de la broma se hacía muy viral por la reacción de Anabel y es que, si la conoces un poco por sus apariciones televisivas, sabrás que ella es única tanto para lo bueno como para lo malo. No podían haber elegido mejor persona para gastar una broma.