Ya no hay protección para Meghan Markle y el príncipe Harry y un reportaje destapa todos sus trapos sucios

Han pasado cinco años desde que el príncipe Harry y Meghan Markle se desvincularon de las funciones de la Casa Real. Su salida provocó un gran revuelo, haciendo que la reina Isabel II tuviera que gestionar dicha salida. Aunque ahora la pareja vive muy alejada de todo el panorama que envuelve la realeza británica, lo cierto es que la revista Vanity Fair ha realizado un reportaje que pretende hablar con quienes han trabajado y convivido con la parejita. Y mira que han dicho auténticas joyitas... ¡Te lo contamos!

Después de que los Sussex de Londres abandonaran sus puestos en la Casa Real, se instalaron en Los Ángeles, muy lejos de lo que a la realeza británica se refiere. Y fue precisamente allí donde concedieron una entrevista en exclusiva a Sharon Stone y Oprah Winfrey, donde Meghan comentó haber sufrido comentarios racistas durante su estancia en Buckingham.

Ahora ha sido la periodista Anna Peele quien ha querido hacer un recorrido más extenso y en profundidad sobre la vida de la pareja, analizando los obstáculos a los que se han tenido que enfrentar, dando a los lectores una visión más íntima sobre la vida y la relación de Harry y Meghan. Este reportaje intenta responder, sobre todo, a la pregunta que todos nos hacemos. ¿Cómo consiguen mantener su relevancia unos duques que mantienen una relación llena de idas y venidas con la realeza británica?

'Fracaso' en los negocios

En cuanto a sus percepciones en los negocios y su relación con los medios de comunicación, recordemos que Harry y Meghan tenían un pódcast en Spotify, donde prometían investigar, analizar y subvertir las etiquetas que intentan frenar a las mujeres. 'Archetypes', tras su estreno en 2022, fue cancelado tan solo después de una temporada.

Ahora, varios años más tarde, un empleado que trabajó con ellos en el pódcast ha revelado que "no hicieron lo que hacen los famosos en los pódcasts, que es encender el micrófono y hablar. Querían un gran tema que explicara el mundo, pero no tenían ideas". Según explica esta persona, Harry habría estado muy interesado en hacer un pódcast sobre 'sociópatas' en el que investigaría a hombres con pasados bastante complicados que les habría llevado a convertirse en sociópatas.

De hecho, otra persona que trabajó con la pareja en lo que a temas de pódcast se refiere, recuerda que Harry dijo: "Tengo un trauma infantil muy malo. Obviamente. Mi madre fue asesinada. ¿Qué hay en mí que no me convirtió en uno de esos tipos malos?".

En cuanto a Meghan, una fuente que trabajó en el área de proyectos de medios afirma que la mujer de Harry siempre seguía el mismo 'modus operandi' en cuanto al trato de sus empleados. Según explica la fuente, al principio se mostraba de forma cálida y efusiva, sin embargo, cuando algo iba mal (normalmente por exigencias), Meghan se tornaba fría con la persona a la que considerase culpable de lo que estaba mal.

El confidente afirma que fue “muy, muy, muy desagradable. Muy doloroso. Porque ella está constantemente jugando a las damas —ni siquiera voy a decir al ajedrez— pero es muy consciente de dónde está cada uno en su tablero. Y cuando no estás, te echa a los lobos en cualquier momento”. La fuente explica que se dedicaba a "hablar mal a sus espaldas. Carcomía su sentido de identidad. Algo así como una adolescente a lo 'Chicas Malas'".

En cuanto al comportamiento de Harry y Meghan con varios de los empleados, las respuestas suelen coincidir bastante. Según el artículo de Vanity Fair, dos fuentes afirman que un trabajador del pódcast de la pareja se habría cogido una excedencia tras trabajar con ellos en tres episodios, para luego abandonar finalmente el proyecto. Asimismo, hay otras personas que afirman haberse tomado largos descansos, e incluso haberse sometido a una terapia prolongada después de haber trabajado con Meghan.

"Creo que si Meghan reconociera sus propios defectos o contribuciones personales a las situaciones en lugar de quedarse atrapada en una narrativa de víctima, su percepción podría ser mejor", afirmaba una extrabajadora.

Su vida lejos de la Casa Real

Tras su salida "real", una de las mayores incógnitas con la pareja era: ¿cuál será ahora su próximo movimiento? Pues bien, hubo una persona en concreto que afirmó que la salida de la Casa Real para Harry estaba siendo un tanto complicada y que, poco a poco tendría que adaptarse a su nueva vida. "Ella fue franca sobre el hecho de que Harry no había hecho muchos amigos todavía", explica la fuente, citando las palabras de Meghan.

Sin embargo, siempre existen visiones varias, y es por eso por lo que la persona que trabajó con ellos en proyectos mediáticos tiene otra opinión. "Creo que Harry no sabe lo que quiere porque creció en una pecera, y por eso no sabe lo que es realmente la vida", explicaba la fuente.

Pese a todos los rumores que pueden haber circulado estos últimos años en redes sociales, todas las personas que han formado parte del círculo de Harry y Meghan concuerdan en que están profundamente enamorados. "Hay tanta pasión entre ellos", afirmaba la persona que trabajó estrechamente con ellos. "Ya sabes, como cuando conoces a esas parejas y piensas, por la forma en que se miran: ‘Probablemente, no debería estar aquí ahora mismo", añadía después.

Los residentes resentidos

Después de muchos años alejados del ambiente que reúne la Casa Real, Harry y Meghan han querido buscar un oasis en Los Ángeles, muy alejados de todo en Montecito. Sin embargo, aquellas personas que ya se encontraban viviendo allí antes de que llegasen los Sussex de Londres, los ponen del lado de los villanos... MUY FUERTE.

Tal y como afirman varias personas que charlaron con Vanity Fair, les atribuyen la subida de la vivienda a ellos tanto como a DeGeneres. De hecho, también les culpan de conducir demasiado rápido e incluso de ocupar todo el aparcamiento de la calle junto a senderos locales, como en el que Meghan fue fotografiada haciendo ejercicio mientras Harry se encontraba en Reino Unido para la coronación de Carlos. Según afirman estas personas, "ya no se puede entrar en Lucky's para cenar".

De hecho, las críticas se refieren a cualquier tipo de aspecto de las vidas de los duques. Según un residente de Montecito, la marca de estilo de Meghan, 'American Riviera Orchard', sería "una especie de mercantilismo". “Es simplemente hallar todas las vías posibles con las que ella puede sacar provecho económico de algo”, explicaba dicha persona, asegurando que al llevar a cabo esa estrategia atraen más atención al lugar de manera negativa.