Los requisitos que Suso Álvarez debe cumplir en su convivencia con Marieta

La de 'pura raza' tiene muy claras sus ideas, sobre todo sentimentalmente hablando. Después de su fracaso amoroso en 'La isla de las tentaciones' y algún que otro intento, la relación con Suso Álvarez se la ha planteado muy seriamente. La pareja ya lleva varios meses juntos y parece que sus normas funcionan, pero ambos deben cumplirlas a rajatabla. ¡Te las contamos!

La verdad es que ambos forman la pareja más inesperada y por la que menos ha dado un duro la audiencia de la historia de la televisión. Desde que se conocieron en el plató de Telecinco, la pareja no se ha separado ni un segundo. Viven juntos y han llegado hasta a hablar de sus planes sobre la futura maternidad de Marieta, confesando que en este momento están muy felices con sus hijos peludos.

Es cierto que la vida del colaborador ha cambiado mucho desde que lo conocemos, y es que no siempre ha sido el colaborador apasionado de la psicología que comenta con mucha gracia lo que ocurre en todos los 'realities' de Telecinco. A Suso lo conocimos con su famoso 'turbopaquet' hace bastantes años como anónimo y a Marieta como la novia con más carácter de 'La isla de las tentaciones'.

Las normas que Suso Álvarez debe cumplir si quiere vivir junto a Marieta

En este momento, a ella la han convertido en el fichaje oficial más potente de la nueva edición de 'GH Dúo', y Suso Álvarez parece que no va a ser su compañero. Suso mejor desde el sillón de colaborador, y a ver hasta donde consiguen que llegue su relación. Por el momento, está funcionando y es que ella misma ha sido la que ha puesto un par de normas irrompibles en su casa.

Primera condición: todo a partes iguales. Si iba a compartir techo con Suso, la economía doméstica también tenía que ser equitativa. Han creado una cuenta bancaria común. Ahí meten los gastos fijos como el alquiler, la luz, el agua, el gas y hasta la compra del súper. Cada uno contribuye con una cantidad previamente estimada, y usan esa cuenta para cubrir todos los pagos.

La segunda condición, más sentimental que logística, fue desprenderse de su querido 'pisito de soltera'. Para Marieta, ese pequeño hogar era mucho más que una vivienda, pero lo ha tenido que tener unos meses por contrato. Entonces, para que ella no se preocupe de pagar dos alquileres, Suso le ha ofrecido que ella siga pagando el de su 'pisito de soltera' hasta que termine el contrato, y solo contribuir con los gastos comunes de su casa.