Sorpresa desde Argentina: la muerte de Liam Payne no fue suicidio (y ya hay detenidos)

La investigación sobre la muerte de Liam Payne ha dado un giro importante: la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional de Argentina ha descartado la hipótesis de suicidio.

En un comunicado emitido este jueves, los fiscales explicaron que llegaron a esta conclusión tras determinar que Payne probablemente estaba inconsciente cuando cayó desde el balcón de su suite en el tercer piso del hotel CasaSur Palermo en Buenos Aires el pasado 16 de octubre. Al parecer, no presentó reflejos de "autopreservación" en el momento de la caída.

El informe toxicológico confirmó que Liam había consumido una cantidad considerable de drogas, lo que contribuyó a que no estuviera "totalmente consciente" o se encontrara en un "estado de disminución o pérdida de consciencia". Esta situación "descarta la posibilidad de un acto consciente o voluntario por parte de la víctima, ya que, en el estado en el que estaba, no sabía lo que hacía ni podía entenderlo".

Los investigadores también señalaron en un comunicado previo que el intérprete de Night Changes estaba solo en su habitación cuando ocurrió la caída fatal, por lo que tampoco se cree que alguien lo haya empujado.

Sin embargo, tres personas fueron acusadas en relación con su fallecimiento, pues los fiscales sospechan que estas personas participaron en actividades ilegales que podrían haber contribuido a la trágica muerte de Liam. Entre los acusados se encuentra un amigo de Liam, cuya identidad no ha sido revelada pero que se presentó como su mánager, y que enfrenta cargos por "abandono de persona", al no cumplir con su deber de cuidado hacia el cantante.

Según informes, la policía intentó contactar al supuesto mánager después de la muerte de Liam usando un teléfono que había entregado al personal del hotel, pero este no respondió. Además, aparentemente, no informó a la familia de Payne sobre su recaída en el consumo de drogas. Este cargo podría llevarlo a enfrentar de cinco a quince años de prisión, según la oficina del fiscal.

Otro de los implicados, Rogelio 'Roger' Nores, quien supuestamente estuvo con Liam en sus últimas horas, se ha desvinculado de las acusaciones, declarando que "nunca abandonó" al cantante.

Los otros dos acusados incluyen a un empleado del hotel y un supuesto traficante, ambos acusados de suministrar drogas a Liam. El informe toxicológico del cantante reveló que había consumido cocaína rosa, una mezcla de drogas que incluye éxtasis, ketamina, cafeína y un psicodélico.

Las fotos del destrozado cuarto de hotel de Liam muestran parafernalia relacionada con el consumo de drogas esparcida sobre una mesa, incluyendo clonazepam, un medicamento utilizado para la epilepsia, espasmos musculares involuntarios y trastornos de pánico.

Además, la policía está investigando a dos mujeres que se identificaron como prostitutas y testificaron bajo juramento que estuvieron bebiendo con Liam en su habitación en las horas previas a su muerte. Según el medio argentino La Nación, una de ellas no pudo responder de manera clara cuando se le preguntó si el propio Liam las invitó al hotel o si fue un empleado quien lo hizo, lo que ha llevado a los investigadores a examinar más detenidamente posibles contradicciones en sus testimonios.

Mientras la investigación continúa, la causa de la muerte de Liam se ha atribuido a los múltiples traumatismos y hemorragias internas y externas que sufrió debido a la caída.

Y en una última actualización, Page Six confirmó en exclusiva que el cuerpo de Liam ha sido trasladado de regreso a Inglaterra por su padre, Geoff Payne, para su entierro.