Inés Hernand la vuelve a liar tirando el Goya de Rigoberta Bandini

La presentadora ha tenido un descuido y ha tirado al suelo uno de los galardones.

Polémica en la alfombra roja de los Goya 2024: críticas a Inés Hernand por pasarse con 'La Sociedad de la Nieve'

Inés Hernand en la alfombra roja de los Goya 2024
Inés Hernand en la alfombra roja de los Goya 2024 / RTVE

Parece que a Inés Hernand no le bastó con convertirse en viral debido a su comentarios en los Premios Goya 2024 acerca de la película ‘La sociedad de la nieve’, pues tenía una sorpresa final para alzarse con el título de personal más buscada de la noche. 

Si las redes ardieron en comentarios y muchas fueron las críticas que recibió acerca de su participación como comentarista de esta gala en la que se premia lo más destacado del cine español, luego fue un momento algo más “gracioso” lo que la convirtió en el centro de todas las miradas. Y es que la presentadora tiró un Goya al suelo. Así, tal cual lo has leído. 

Inés Hernand tira un Premio Goya al suelo

Inés Hernand comentó la gala de los Premios Goya 2024 tanto desde la alfombra roja, donde protagonizó más de un polémico momento muy criticado en las redes sociales, como la postgala, en la que entrevistó a algunos de los galardonados de la noche.

Una de las premiadas que se acercó a habla con Inés fue Rigoberta Bandini, quien se hizo con el Premio Goya a mejor canción original por 'Yo solo quiero amor'. Una feliz noche que vio algo empañada debido al tropiezo que sufrió su galardón cuando la cantante se lo prestó a Inés Hernand.

Mientras estaban en el set de entrevistas, Inés cogió el galardón, que imaginamos no debe pesar poco, y fue a saludar a otro de los invitados cuando, al abrazar a este, cayó al suelo el Premio Goya. Y no fue un golpe de nada, pues sonó con bastante fuerza, ya que todos los presentes miraron a ver cuál era el motivo de tal estruendo. La cara de Rigoberta no tiene desperdicio, obvio. La artista en seguida se tapa la boca con una expresión de asombro sin creer del todo lo que están viendo sus ojos.

Y es que, querida Rigoberta, lo mejor es no dejar al alcance de nadie un galardón tan preciado como un Premio Goya.

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