La última hora del estado de Madonna tras ser ingresada en el hospital

Como han confirmado amigas cercanas de la artista como Rosie O'Donnell y Debi Mazar en sus redes sociales, Madonna se encuentra ya fuera de peligro y recuperándose en casa de la "grave infección bacteriana" que, según cuentan sus allegados, estuvo a punto de costarle la vida el sábado pasado. La reina del pop, de 64 años, abandonó la Unidad de Cuidados Intensivos el pasado jueves y, hasta este viernes, no habían trascendido muchos más datos sobre el motivo de su hospitalicación.

Según han revelado ahora fuentes de su entorno, la ambición rubia está todavía muy lejos de su estado óptimo, y no lo está pasando precisamente bien. Estos informantes han señalado al portal de noticias TMZ que Madonna no puede moverse de la cama debido a los fuertes dolores y mareos que todavía la aquejan. Por si no fuera suficiente, las náuseas derivadas de su enfermedad la llevan a "vomitar incontroladamente" y con excesiva frecuencia, acentuando así su particular calvario.

En cualquier caso, lo importante es que la estrella de la música se está recuperando, como afirmaba su mánager, Guy Oseary, en un comunicado emitido a mediados de esta semana. Se desconoce oficialmente la verdadera gravedad de su dolencia y, por tanto, el riesgo real que conllevó para su vida.

Los diversos relatos que han ido surgiendo en los últimos días, siempre procedentes de fuentes anónimas, chocan a la hora de identificar el origen de sus males. Según el medio británico Daily Mail, la clave estaría en el entrenamiento espartano que practica Madonna, quien se habría sometido a doce horas diarias de ensayos para preparar su nueva gira mundial, y su tozuda negativa a aceptar que "ya no es joven". Otros confidentes, como cuenta TMZ, señalan que Madonna llevaba cerca de un mes ignorando unos niveles moderados de fiebre que, finalmente, derivaron en una grave infección.