Ruta de brunchs bonitos en Madrid: del estético al más foodie
Cuando no hay mucho dónde elegir es difícil, pero al contrario, también pasa lo mismo o resulta incluso peor. En una ciudad como Madrid, en la que casi cada cafetería se ha sumado al brunch, resulta toda una odisea escoger los más cuquis de la capital.

Madrid es un paraíso para las amantes del brunch, y no lo decimos solo por la cantidad, sino por la variedad, la estética y la creatividad con la que muchos locales han reinventado esta comida que ya no es solo de fin de semana.
Si eres de las que adora una tostada de aguacate bien instagrameable o un café de especialidad, aquí te descubrimos una ruta con cinco brunchs que son pura fantasía, ideales para ir con amigas, hacer fotos preciosas y, por supuesto, comer delicioso.

Frutas Prohibidas: 100 % plantbased
En pleno Chueca, en el número 11 de la calle San Lucas encontramos este espacio que es una auténtica fantasía visual. Entre plantas colgantes y con gran luminosidad gracias a sus amplias cristaleras, Frutas Prohibidas es perfecto si lo tuyo es disfrutar de un brunch 100 % plantbased.
¿Te imaginas tomarte unos huevos benedict con su yemita pero sin gallinas de por medio? Aquí es posible y lo sirven sobre su brioche mítico, con crema de aguacate y hummus, lonchas de bacon (que no son bacon, of course) y una salsa holandesa divina. Y si lo complementas con un red velvet latte a base de remolacha, vainilla, cacao y leche a elegir, no se le puede pedir más a este brunch.
Le Praliné Brunch: el brunch más espontáneo
Si algo nos gusta de los locales que Le Praliné Brunch tiene en Madrid es que no necesitan reserva y eso es de agradecer si nos apetece disfrutar de un brunch improvisado. Su local más cuqui es el de la calle Barco 27, justo detrás de Gran Vía, que ofrece café de especialidad y una amplia oferta gastro.
Nuestros favoritos son el bagel Windsor que preparan con huevo frito, jamón ibérico, brotes verdes, tomate, queso crema y mix de semillas o el Benedict de Pulled Pork, una fantasía que además de exquisita será lo más en tu feed de insta.
Federal Café: el clásico
Federal es un clásico en Madrid, pero sigue siendo uno de los brunchs más cool y consistentes de la ciudad. Tienen varios locales, pero los más conocidos son los de Malasaña (plaza de las Comendadoras) y La Latina (calle Conde de Barajas, 3).
Con una estética nórdica y mesas compartidas ideales para ir a trabajar o pasar el rato con tus amigas, no deberías irte de allí sin probar su french toast con compota de arándanos, mascarpone y piñones. También tienen una interesante variedad de pancakes y batidos de frutas.
Hard Rock Hotel Madrid: el más rockero
En plena Ronda de Atocha, en el número 17, se encuentra Hard Rock Hotel Madrid. No tengas miedo en cruzar sus puertas y llegar hasta el restaurante Sessions, donde podrás disfrutar del brunch más rockero de la capital. Puedes arrancar con una cesta de bollería y pan recién horneado y una tabla de embutidos, seguida de una granola casera con yogur, fruta fresca y salmón ahumado, así como café, infusiones y zumos naturales.
Entre los platos principales puedes elegir entre la ensalada César con pollo crujiente, tartar de salmón sobre una base de aguacate a la brasa, o los clásicos huevos benedict, que puedes disfrutar con jamón, salmón o espinacas. Y si eres más de hamburguesas, también tienes varias opciones para elegir. Y como todo brunch, debes acabar con un toque dulce gracias a la cheesecake con salsa de frutos rojos, el brownie de chocolate con nueces y helado de dulce de leche o yogur natural con miel, cereales y arándanos.
El Jardín Secreto de Salvador Bachiller: brunch de cuento de hadas
Si quieres vivir una experiencia de película, tienes que conocer este brunch. El Jardín Secreto está escondido en la azotea de la tienda Salvador Bachiller de la calle Montera y es uno de esos sitios mágicos que sorprenden desde que entras. Decorado con flores, plantitas y detalles vintage, parece salido de una película de fantasía.
Su brunch se sirve a diario por un precio de 29 euros e incluye un primero (a elegir entre huevos benedict, tosta de aguacate, focaccia de salmón ahumado o shakshuka guisado con especias, queso feta, aguacate y huevo poché) y un segundo (tienes gofre con plátano y dulce de leche, tortitas con frutos rojos o crema de avellanas, bowl de açai o pitaya con fruta fresca, pudín vegano de chia con mango, maracuyá y coco o batido quita penas). Además, incluye café o té y una segunda bebida.
En definitiva, si quieres disfrutar de un brunch en Madrid y no sabes por cuál decidirte, aquí tienes una ruta que te llevará a conocer desde el más rockero al más estético pasando por el más foodie. Así que ya sabes, saca un outfit bonito, carga el móvil y prepárate para disfrutar de alguno de los mejores brunchs de la capital.
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