El restaurante de Madrid en el que no hace falta ser La sirenita para poder disfrutar de una comida bajo el mar

En pleno barrio de Las Letras de Madrid, en la calle Prado, los turistas se agolpan frente al número 8. Un neón iluminado anuncia que se trata de Bestial by Rosi La Loca, un restaurante en el que no hace falta ser La sirenita para poder disfrutar de una comida bajo el mar.

Nada más cruzar la cristalera de entrada, nos sumergimos en un ambiente que nos traslada a las profundidades marinas. En el salón principal, nos volvemos locas con los mil y un detalles que decoran desde el suelo hasta el techo y las paredes. Nuestra vena de influencers se apodera de nosotras, ya que no podemos dejar de hacer fotos y videos. Cada rincón ofrece infinitos detalles que son fantasía pura.

La barra de coctelería se encuentra escoltada por una inmensa vidriera de botellas y brebajes, mientras que una imponente sirena y unos tentáculos de pulpo gigantes, presentan la barra de sushi.

Recorriendo las profundidades marinas

Una vez atravesado el salón principal, se accede a la zona del Piano Mar, en la que, una mesa infinita se ve envuelta en un fascinante juego de luces que trasladan los arrecifes de coral al centro de Madrid. Y, si nos atrevemos a seguir descubriendo el espacio, llegaremos hasta las aguas profundas, un espacio íntimo en el que disfrutar de la carta líquida de Bestial. Las paredes están forradas con terciopelos de estampados marinos; las columnas evocan ruinas submarinas, mientras que Poseidón nos vigila.

Un martes noche por el local pasa todo tipo de clientela. Y todo el mundo parece satisfecho. Influencers, familias con niños que alucinan con la vajilla, grupos de amigos, compañeros de trabajo, parejas. Y es que el concepto de Bestial encaja con cualquier tipo de público gracias a una variada carta con ticket medio de 40 euros, un buen ambiente y un local que parece el set de rodaje de una película de Disney.

Vladimir Bojovic, Maître de Bestial by Rosi La Loca, nos cuenta que ‘todo el mundo es bienvenido, tanto el que quiera disfrutar de una comida o cena, como si simplemente quieren probar la carta líquida’. Además, la cocina non stop hace que los turistas (con esos horarios tan europeos que tienen) puedan gozar fuerte desde la 1 de la tarde hasta la 1 de la madrugada, cuando cierran cocina.

La propuesta gastronómica de Bestial corre a cargo del Chef Ejecutivo, Javier Alfaro, que apuesta por una materia prima de calidad, rematada gracias a elaboraciones creativas y una intensa fusión de sabores. Podemos abrir boca con platos para compartir como las zamburiñas con mayonesa kimchi y ralladura de lima o el brioche de calamares. El uramaki de salmón es un imprescindible para los amantes del sushi, mientras que, si se quieren probar los platos estrella, hay que decantarse por las patatas bestiales, la tortilla Lays o las croquetas de jamón ibérico.

Si te gusta el pulpo, la propuesta de Bestial, servida a la brasa y con parmentier de patata es un ‘must’ y, para compartir también, el falso risotto de puntalette con crema de boletus y trufa resulta de lo más sabroso. La ración es muy abundante, pero, ya os advertimos que conviene dejar sitio para el postre, ya que tanto el tiramisú como la tarta de queso (que se alzó como la mejor tarta de queso de la Comunidad de Madrid en 2024) son una auténtica fantasía.

La carta líquida de Bestial cuenta con 17 cócteles de autor, divididos en tres tipologías. La primera, ‘Flotar’, ofrece opciones dulces; ‘Respirar’ nos invita a degustar cócteles frescos y ácidos, mientras que, ‘Sumergir’ sorprende con creaciones más profundas y complejas.

En definitiva, Madrid cuenta con opciones culinarias para todos los gustos, pero si lo tuyo son los ambientes de fantasía y te quieres sentir como La sirenita, Bestial te invita a sumergirte en las profundidades marinas sin necesidad de viajar hasta la costa.