A Ryan Reynolds le pone el traje de Deadpool... Su madre

Lo que una madre no haga por ti...

Ryan Reynolds en pleno rodaje de Deadpool 2
Ryan Reynolds en pleno rodaje de Deadpool 2 / Kred, PacificCoastNews

Ryan Reynolds (41) no es ni mucho menos el único actor de Hollywood (y menos en una época plagada de adaptaciones cinematográficas del mundo del cómic) que ha tenido que echar mano de su ingenio y creatividad para poder enfundarse en los ceñidos trajes que definen el día a día de numerosos superhéroes. Pero en su caso ha tenido que pedir ayuda a quien más sabe, su madre.

A diferencia por ejemplo del extremo cuidado con el que Tom Holland se quitaba su uniforme de Spiderman para poder ir al baño, Ryan consiguió acelerar significativamente el proceso para transformarse en el deslenguado Deadpool, como él mismo ha desvelado ahora, al recurrir a su adorada madre para que elaborara un ungüento especial que le facilitara la tarea.

"La verdad es que creamos un sistema muy sofisticado para poder ponerme y quitarme el traje con relativa rapidez. A mi madre se le ocurrió una receta casera bastante efectiva y, como vive en Vancouver, podía venir al set de rodaje con frecuencia y me untaba con ello antes de empezar a grabar", ha confesado el contar, pero sin entrar en detalles sobre los ingredientes de la original pomada (la última que habló de una fue Sandra Bullock y daba bastante grima).

Por suerte para él, a su mami no le escandalizó en absoluto ser testigo de cómo su hijo se pasa media película soltando exabruptos por la boca, haciendo gala de su lado más descarado y realizando toda clase de referencias sexuales, teniendo en cuenta que Ryan es el menor de cuatro chicos que vivieron con intensidad sus adolescencias.

"¿Que si se me permite decir palabrotas delante de mi madre? Bueno, depende de la situación, pero a estas alturas creo que ya lo ha escuchado todo. Soy el pequeño de cuatro chicos que tenían la casa revolucionada", ha bromeado.

Síguele la pista

  • Lo último