Rocío Carrasco se llevó un chasco buscando piso en Barcelona, ¡qué risas con 'las golfas'!

Rocío Carrasco (45) está dentro de la lista de 13 vetados de Telecinco, pero parece muy contenta en su aparición en TVE Catalunya, donde ha contado un par de anécdotas muy divertidas que le ocurrieron mientras buscó piso por Barcelona hace ya unos cuantos años. Después de las docuseries sobre su vida sentimental y familiar en la cadena más importante de Mediaset, la artista debe decir adiós para siempre... Pero no lo lleva mal, peor fue la búsqueda de piso, donde se topó con 'las golfas' de Barcelona. ¿Cómo es posible? ¡Te lo contamos!

Rocío Carrasco aparece en una lista de 13 personas que han dado mucho contenido hasta el momento pero que dejarán de aparecer en Telecinco a partir de ahora, como Kiko Rivera o Bárbara Rey. Lo cierto es que para ella no ha sido algo tan malo, o así lo hace ver en TVE Catalunya cuando habla con el presentador Marc Giró en su programa: 'Late xou'.

Haciendo balance de la docuserie, afirma que el resultado fue "muy positivo", aunque la grabación no fue nada fácil para ella. Respecto a su veto en la cadena, asegura que: "He podido volver a vivir, que era complicado para mí". Y en cuanto a vivir, tenemos la joyita del día: su búsqueda de piso en Barcelona.

Apartándose un poco del drama mediático, nos cuenta con su carisma cómo fue la experiencia de buscar piso junto a Antonio David Flores (47), al que no mencionó en ningún momento... Y como era de esperar, con más de un contratiempo... Pero MUY divertidos.

"Iba a alquilar un piso y había prensa por todo el pueblo. Una señora empezó a enseñármelo y de pronto me dijo: 'Aquí están las golfas'. Claro, le dije que no tenía nada contra ellas pero que no podía vivir en un sitio donde vivían golfas, con la prensa en la puerta y las golfas ahí...", es la explicación que ha dado en el 'show' de Marc. Todo el mundo expectante de su situación, entre risas, acabó desvelando que la expresión de 'las golfas' significaba en catalán 'el desván'. ¡Vaya forma de aprender idiomas, querida!

Y eso no fue todo: visitando otro apartamento, asegura que el casero no paraba de decirle 'així mateix', a lo que ella directamente asociaba con asomarse por el balcón. ¡Claro, como haría cualquiera! Sin embargo, lo que realmente decía el casero era 'así mismo'. La colaboradora se asomó tantas veces que acabó por preguntarle: "¿Qué quiere que vea ahí abajo?". Otra cosa no, pero las vistas de toda la casa las revisó aquel día.

Sin darse cuenta, la colaboradora ya se había ganado el favor del presentador y del público, que no pudieron parar de reír en toda la noche... Si es que aquí cada uno aprende cosas como puede.