Natalia Sánchez, sobre su adolescencia en 'Los Serrano': "Estuvo condicionada"

"Es una vida distinta", ha confesado. 

La actriz Natalia Sánchez en un evento promocional de Eucerin
La actriz Natalia Sánchez en un evento promocional de Eucerin / GTRES

Por cómo lo pintamos los medios, parece que la fama es aquello que muchos desean por la inmensidad de privilegios a los que se tiene acceso. Ser famosa, en muchas ocasiones, significa tener dinero, compañías muy selectas y poder acceder a esos caprichos que no todo el mundo podría tener en su mano. Sin embargo, esto cambia mucho cuando te conviertes en una personalidad pública cuando apenas eres una niña y no puedes disfrutar de eso exactamente, de eso ha querido hablar Natalia Sánchez, sobre su adolescencia en 'Los Serrano'.

Sobre todo ello ha reflexionado Natalia Sánchez en su última intervención radiofónica, en el programa que conduce Mara Torres en Cadena SER, 'El faro'.

La actriz madrileña, a quien conocemos sobradamente por su papel en 'Los Serrano', ha hecho un repaso de cómo fueron sus inicios en el mundo de la interpretación y cómo lo recuerda ella a día de hoy, así como el modo en que logró gestionar la fama que le había dado su personaje en la serie, Teté Capdevila.

Fue desde los 12 hasta los 18 años el tiempo que pudimos verla en la pequeña pantalla, acompañada de Antonio Resines, Víctor Elías, Belén Rueda y Fran Perea, entre otros; tiempo que, según la actriz, "condicionó su adolescencia".

"A mi me dolía mucho, sobre todo por mis amigas. Yo tenía por una parte el sufrimiento de la fama, pero por otra parte la alegría de que te conocieran", ha comentado en este espacio radiofónico, donde ha revelado que es, en esencia, "una vida distinta".

La actriz ha recordado que, incluso, de esas salidas nocturnas con sus amigas solo recuerda la cantidad de autógrafos que le pedían otros asistentes a la sala o discoteca de turno. "Mis amigas sufrían porque si íbamos a una discoteca me pasaba todo el rato firmando autógrafos. Me sabía mal por ellas porque si íbamos a una discoteca tenían la parte buena de que a lo mejor nos ponían en un reservado, pero me pasaba todo el rato firmando y haciéndome fotos, dando besos a la gente y ellas tampoco disfrutaban", ha añadido.

No obstante, Natalia pensaba que todo lo que le estaba sucediendo se debía a su público y se sentía en deuda con él para cumplir con lo que le pedía. "Era parte de mi trabajo, entonces no me molestaba tanto. Ellas sí es verdad que decían a veces: 'Jo, Nata, es que esto es un poco insoportable'", ha desvelado. A pesar de estos inconvenientes, la actriz ha reconocido estar "profundamente agradecida" a este personaje televisivo por poderse dedicar hoy a lo que le gusta, tanto dentro de España como fuera de las fronteras de su país natal.

Síguele la pista

  • Lo último