Carlos Lozano está hasta el unicornio de 'Supervivientes' y de Miriam Saavedra

Los castigos le quitan las ganas de seguir adelante.

Carlos Lozano en 'Supervivientes' con Miriam Saavedra
Carlos Lozano en 'Supervivientes' con Miriam Saavedra / Supervivientes

va de mal en peor en '<strong>Supervivientes</strong>'. Carlos Lozano va de mal en peor en 'Supervivientes'. Los tres castigos que ha recibido están hundiendo sus ganas de participar en el 'reality' y no hace más que pedir al público que lo mande a su casa el próximo jueves con las expulsiones de la gala. Pero para rematar su agonía isleña el programa le ha mandado una visita que ha sido la gota que ha colmado el vaso, Miriam Saavedra (disfrazada de unicornio) ha llegado a Honduras, señores y señoras.

El 'superviviente' no puede más, está recibiendo un palo detrás de otro y todo ello sin ninguna compensación como una llamada telefónica o una conexión en directo con alguien a quien aprecie. En una conexión en directo con Carlos Sobera ha dejado a través de sus lágrimas, de sus palabras y de sus gestos que toda esta situación lo está superando.

El concursante se siente desplazado, parece que no le importa a nadie, siente que la dirección del programa está apartando los focos de su persona y centrándolos en sus compañeros, o al menos eso es lo que ha expresado frente a la cámara. El presentador ha intentado animar la situación pero en cuanto Miriam Saavedra ha llegado a la orilla disfrazada de unicornio la tensión ha aumentado.

La exconcursante de 'Supervivientes' y 'GH VIP' ha llegado con muy buena energía hasta los brazos de Carlos Lozano pero este no la ha recibido como se esperaba. Todavía afectado por la sincera conversación que ha mantenido con el moderador del 'reality' el 'celeb' no se ha alegrado nada con la visita de Miriam, es más, parecía algo resentido con ella.

La ganadora de 'Gran Hermano VIP' no ha dejado que esta mala energía destroce su momento, ha cogido aire, se ha calmado y con una sonrisa en la cara ha contestado muy educadamente a su compañero. Esperemos que cuando Carlos se relaje un poco puedan tener una conversación menos tensa ¿problemas en el paraíso?

Síguele la pista

  • Lo último