El backstage de los Oscar: secretos y anécdotas de la gala que no se ven en televisión
Y es que, la magia de los Oscar no solo está en el escenario, sino también en lo que ocurre fuera de las cámaras.
¿Cuánto dinero vale un Premio Oscar legalmente?

Los Premios Oscar son la gran noche del cine, donde las estrellas desfilan por la alfombra roja con sus mejores looks, se emocionan con los discursos y protagonizan momentos virales que dan la vuelta al mundo. Pero lo que vemos en televisión es solo la punta del iceberg. Detrás del glamour y las cámaras hay un mundo paralelo lleno de anécdotas, nervios y detalles que no siempre salen a la luz. ¿Quieres saber qué pasa realmente tras las bambalinas? Te lo contamos todo.
El otro "camerino" de las estrellas
Los Oscar no serían lo mismo sin su mítica alfombra roja, pero antes de pisarla, los nominados y presentadores pasan por un exclusivo 'holding area', una especie de sala VIP donde esperan su turno. Allí, los nervios están a flor de piel, se intercambian miradas de complicidad y más de uno aprovecha para ensayar su discurso de agradecimiento… o para brindar con champán.
Este espacio es también un desfile de estilistas, maquilladores y asistentes que hacen los últimos retoques antes de que sus estrellas salgan frente a las cámaras. Se dice que algunas actrices llevan bolsas de hielo en la cara antes de los flashes para reducir la hinchazón y lograr ese efecto buena cara instantáneo.
Los baños más cotizados de Hollywood
Sí, suena raro, pero los baños del Teatro Dolby son un auténtico punto de encuentro de las estrellas. Durante la publicidad, muchos nominados aprovechan para salir corriendo (literalmente) y evitar la típica imagen incómoda de estar fuera de su asiento cuando la cámara hace un paneo del público.
En una de las ediciones más recientes, Jennifer Lawrence contó que se topó con Meryl Streep en el baño y, entre nervios y prisas, casi la tira al suelo. "No hay nada más surrealista que chocar con Meryl Streep mientras intentas arreglarte el vestido", bromeó después.
La 'gymkana' de los ganadores
Mientras los ganadores suben al escenario a recoger su premio, los perdedores deben mantener la compostura y aplaudir con una sonrisa. Pero cuando la cámara deja de grabar, y una vez que han terminado su discurso (a veces interminable) de agradecimiento, los que sí ganan pasan por un protocolo de celebración que incluye fotos oficiales, entrevistas y, por supuesto, alguna quer otra copita de champán para celebrar.
El secreto mejor guardado: el sobre de los ganadores
A pesar de los rumores, los presentadores no saben quién ha ganado hasta que abren el sobre en directo. Solo dos personas en el mundo conocen los resultados antes de la gala: los responsables de la empresa PricewaterhouseCoopers, que se encargan de contar y custodiar los votos.
Para evitar filtraciones, llevan dos maletines idénticos con las tarjetas de los ganadores y cada uno memoriza la lista de premiados. Por eso, cuando ocurrió el famoso error en 2017 (cuando se anunció por equivocación que 'La La Land' había ganado el Oscar en vez de 'Moonlight'), la confusión fue máxima tanto dentro como fuera del escenario.
La locura del afterparty
Después de la ceremonia, la fiesta sigue. Y aunque los Oscar son conocidos por su elegancia, en las fiestas posteriores los actores se relajan, cambian los tacones por zapatillas y se permiten un poco más de libertad. La Vanity Fair Oscar Party es una de las más exclusivas, y cada año deja anécdotas inolvidables.
Un clásico de estas fiestas es ver a los ganadores de fiesta sin soltar su estatuilla, ni siquiera para la recena, como le ocurrió a Joaquin Phoenix, que fue fotografiado junto a Rooney Mara mientras se comían una hamburguesa con su premio en la mano, demostrando que después del glamour, lo que más apetece es una buena burger.
Como conclusión, podríamos decir que lo que pasa en los Oscar… rara vez se queda en los Oscar, porque aunque en televisión estos premios parecen una gala perfectamente orquestada, la realidad es que el backstage es un mundo aparte, donde las estrellas son personas normales con nervios, prisas y momentos de pura espontaneidad.
Síguele la pista
Lo último