Borja González reacciona al divertido gesto de su hijo Luca tras 'Supervivientes'
El ganador de la última edición del reality ha regresado a Valencia con su familia, y esta ha sido su sorpresa al llegar.
Se nota, se siente, la tensión entre Anita y Montoya está presente.

Después de 113 días fuera, Borja González vuelve a casa, a Valencia, donde ha redescubierto algo inesperado y profundamente emotivo tras su paso por 'Supervivientes 2025'. El concursante, convertido en ganador de ‘Supervivientes 2025’, regresó a su tierra acompañado del cheque de 200.000 € y una victoria inesperada que ya ha cambiado todo en su vida.
De la selva al tren: "Cuántas noches de insomnio…"
Borja lo resumía a la perfección desde el tren que lo traía de vuelta: "Ahora sí, 113 días después vuelvo a casa. Cuántas noches de insomnio echando de menos mi casa, mi gente, mis rutinas, mi terreta... mi vida". Con esa maleta emocional comenzó su remontada. Porque no fue fácil: Luego los compromisos mediáticos, incluyendo el debate final. Hasta ahora no había podido reencontrarse de verdad.
El momentazo viral: Luca ya pide dinerito (¡y Borja flipa!)

Borja no podía estar más emocionado al pisar tierra firme en Valencia tras 113 días de reality, y lo primero que soltó al ver a su pequeño fue un ilusionado: y "¡Mi niño!". Pero lo que no se imaginaba ni de lejos era el recibimiento tan peculiar que le tenía preparado Luca. El peque, que apenas tiene un añito, al ver a su papi se puso a frotarse los deditos en el clásico gesto de "dinero". Sí, sí, como lo lees: ¡el heredero ya va pidiendo su parte del premio!
Ana, divertida, se unió al show soltando un "Dinerito" entre risas, mientras Borja no podía creer lo que estaba viendo: "¿Ya me estás pidiendo dinero? Solo quieres dinero. El dinero ya lo traje, se llevó tu madre el cheque", soltaba entre carcajadas. Horas más tarde, aún flipando con la escena, Borja lo resumía todo en una frase que ya es historia en redes: "Esto es para lo que me quiere mi familia".
¿Hubo reconocimiento paterno?
Pero no todo fue igual a su regreso. En una rueda de prensa tras la final, Borja confesó que el primer encuentro con Luca no fue tan lleno de abrazos: "Me vacilaron. Me dijeron que estaba en Valencia. Y cuando llegué al hotel, me trajeron a mi hijo". Además, añadió con gracia: "No sé si me ha reconocido del todo con la barba y tal. Está ahí, ahí, creo yo. Se queda mirando como diciendo '¿Este es mi padre o quién es este?'". Entre risas, esa anécdota demuestra que la paternidad también viene con reajustes emocionales para ambos.
La familia y el cheque: prioridades claras
Ganarse los 200.000 € fue solo el comienzo. Borja ha decidido destinarlos a necesidades reales: comprarse un coche después de perderlo con la DANA y comprar una casa para su familia. Y no es todo: agradeció públicamente a Ana por su apoyo incondicional. "Si ella no se hubiera quedado con mi hijo, yo nunca habría ido a ‘Supervivientes’… A lo mejor ha sido más dura la supervivencia de ella fuera que la mía dentro", reconoció.
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