Makoke revienta la final con su profecía y pone entre la espada y la pared a la organización de 'Supervivientes'

Makoke ha abandonado Honduras con más fuerza que cuando llegó. Emocionada, pero sin filtros, la excolaboradora soltó varias bombas al pisar plató. "Quiero darle las gracias al programa… he crecido personalmente… tengo unos meses muy bonitos por delante", dijo con una mezcla de emoción y alivio. Pero lo más fuerte llegó después, cuando, sin que nadie se lo pidiera, dejó caer lo que ya muchos comentaban en redes: "Sin lugar a dudas… va a ganar Montoya porque la audiencia lo está salvando siempre. Sin ser un gran superviviente… creo que tiene el favor del público y que va a ganar él".

Con esta frase, Makoke ha puesto en un aprieto monumental a la organización del reality, que ahora se enfrenta al reto de mantener la emoción en una final donde, según ella, ya estaría todo decidido.

Su quiniela no deja títere con cabeza

Pero no solo habló de Montoya. Makoke vino con lista de predicciones bajo el brazo, y no se cortó nada en ordenar el podio: "Damián será quinto, porque es el menos fuerte de todos en cuanto apoyo. Borja será cuarto. Anita, tercera, porque aunque tiene muchos seguidores, Montoya le birla más votos. Escassi quedará segundo porque es muy buen superviviente y la gente le ha salvado incluso pidiendo su expulsión". 

Y el primero, claro, Montoya. El mismo al que ha acusado de tener "el favor del público" sin ser el más fuerte ni el que más méritos ha hecho. Aun así, matizó su sentencia: "Es lo que creo, pero no es lo que quiero o deseo". Vamos, que si gana Montoya y no Escassi o Anita, el título de superviviente del año vendrá con sospechas de serie.

Una crítica que suena a golpe en la mesa

Las palabras de Makoke no son inocentes. Y aunque intenta rebajar el tono diciendo que es solo su opinión, la frase "ya está decidido" no ha pasado desapercibida. Lo dijo con tal seguridad que, por unos minutos, pareció más jurado del programa que concursante expulsada.

¿Qué implica esto para la final?

Las palabras de Makoke han puesto un foco enorme sobre Montoya. Si gana, como ella vaticina, será muy difícil evitar que se hable de favoritismos. Si pierde, todo el relato se viene abajo… o se confirmaría que la audiencia ha reaccionado justo a tiempo. En cualquier caso, la gala final se presenta como un campo de minas televisivas. Porque si alguien como Makoke —que ha vivido desde dentro el reality— cree que el juego está más que marcado, el espectador se queda con la mosca detrás de la oreja. Y lo peor es que lo ha dicho con esa mezcla de seguridad y resignación que hace que te lo creas.

En el fondo, Makoke no ha hecho más que verbalizar lo que muchos piensan. Y si Montoya resulta finalmente vencedor, será inevitable que sus palabras se conviertan en profecía cumplida. "La gente le está salvando siempre", repitió. Y claro, cuando lo salvas siempre, lo acabas coronando.