Blanca y radiante va Penélope Cruz a San Sebastián

El festival de cine de San Sebastián ha decidido rendirse este año ante el talento de Penélope Cruz (45). Que no es que no se hubiese rendido ya a ella, lo único que todavía no le habían dado un premio tan importante como es el galardón honorífico por toda su carrera. Y hasta 'Sanse' que se ha ido la actriz madrileña para acudir a una gala en la que no tenía ni idea de lo que le esperaba. ¿Por qué lo decimos?

Estaba claro que Penélope sabía qué premio le iban a entregar, pero no sabía quién. Efectivamente. De ahí que la actriz, vestida de blanco impoluto (aunque ahora más adelante hablaremos de su look) no pudiese evitar un poco las lágrimas cuando vio aparecer a su amigo Bono, el líder de U2 para hacerle entrega de un premio tan especial para ella.

Mientras Penélope estaba en el escenario esperando a recoger el galardón, la organización anunció que el cantante estaba allí específicamente para entregárselo. ¡Maravilla! Un premio que recogió con un precioso vestido blanco, color que parece ser uno de sus preferidos últimamente.

Fantasía de momento, no digáis que no. Como fantasía también es el look de Penélope Cruz. Y no, no vamos a mentir. Todavía no sabemos quién firma este diseño pero podemos decir que, aunque complicado, la actriz lo defiende de maravilla. Y decimos lo de complicado porque es una creación que tiene un poco de todo. Parte superior asimétrica, cinturón, plumas, falda abullonada... Vaya, que no le falta detalle.

Y si para esta ocasión tan especial apostó por el blanco, horas antes en la presentación de su nuevo proyecto, 'WASP', también aprovechó para lucir conjunto del mismo tono, pero esta vez en forma de traje.