GALARDÓN A LA INNOVACIÓN TECNOLÓGICA

Tres estudiantes catalanes de ESO pasarán un mes en Sillicon Valley tras ganar un concurso

El Audi Creativity Challenge premia un proyecto para conectar puntos de recarga de vehículos eléctricos de particulares

ELISA ARÉVALO / BARCELONA

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¿Cómo mejorarías la movilidad del futuro en tu ciudad? Así se convocaba a los jóvenes estudiantes a participar en el Audi Creativity Challenge, un concurso donde se reta a adolescentes a tener ideas creativas y en el que se ha impuesto un equipo del colegio barcelonés Escola Pia de Sarrià. El premio no podía ser más suculento: un viaje a Sillicon Valley (California, EEUU) -la cuna de la innovación tecnológica- para desarrollar su proyecto.

El equipo Smart Teen Mobility -formado por Alex, Elsa y David- ganó con el proyecto ‘Sharge’, que consiste en conectar puntos de recarga de coches eléctricos de particulares. “El objetivo es dejar que alguien venga a tu casa a cargar su coche eléctrico y a cambio tu puedes cargar tu vehículo en otra casa o recibir monedas canjeables por euros”, explicaba uno de los ganadores. Su idea se impuso a las más de 200 que se inscribieron en la competición. La final, que tuvo lugar el pasado sábado 25 de junio en Madrid, contó con 10 equipos finalistas, la mayoría de ellos de la provincia de Barcelona.

Los equipos, formados por tres participantes y un tutor, tenían que desarrollar un proyecto que respondiera a estas cuestiones: ¿Podremos ayudar a los mayores a moverse más seguros por nuestra ciudad? ¿Encontraremos la solución para ahorrar tiempo en desplazamientos? ¿Están bien diseñadas las calles? ¿Conseguiremos hacer más accesible nuestra ciudad?.

PROTOTIPO CON PAPEL DE VÁTER

Los jóvenes de cuarto de ESO empezaron el proyecto con un prototipo hecho con un rollo de papel de váter para llegar a lo que es ahora el 'Sharge', un dispositivo con tecnología 'blockchain' que permite conocer la disponibilidad de los puntos de recarga y a los usuarios conectados en ese mismo momento. Proyecto que consiguieron desarrollarlo con trabajo y gracias a las fases tan claras que les marcaba el concurso: generación de ideas, detectar un problema, prototipaje y comunicación.

La recompensa de estos jóvenes será un viaje a Sillicon Valley donde pasarán un mes este verano desarrollando su proyecto con visitas a empresas como Google, Twitter o Facebook y asistiendo a charlas de expertos.