VIDA DIGITAL

Las aseguradoras entran a proteger a los menores del ciberacoso

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Carmen Jané / Barcelona

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Las cifras del ciberacoso, pese a las campañas de rechazo y concienciación, están llegando a tal extremo -la OCDE, por ejemplo, calcula que uno de cada siete menores ha sufrido acoso digital en Catalunya- que hasta las compañías de seguros están comenzando a cubrir los daños a la reputación digital. Varias empresas, como DASZurich o Arag, han ido presentando seguros que buscan proteger a particulares -y sobre a familias con menores a su cargo- contra el ciberacoso, el robo de información, la suplantación de identidad o las estafas online.

Son seguros que se incluyen dentro de las llamadas pólizas de "responsabilidad jurídica", aquellas por las que se contrata un servicio global de abogado que incluye cualquier contingencia, tanto a adultos como a menores, y más que una indemnización para sus víctimas, lo que se asegura es que alguien les va a resolver el problema. "Son servicios, no productos aseguradores. No pretenden resolver siniestros, sino resolver situaciones derivadas de la presencia digital", afirma Mariana Bahía, responsable de innovación de Arag.

Cuando el cliente los contrata, la mayoría de las compañías suelen proporcionar programas informáticos para ordenador o 'app' para móviles y tabletas que rastrean la actividad del usuario y captan pruebas ante una posible demanda o reclamación. Algunos dirigen la gestión del producto a los padres, otros a los propios menores.

'App' exclusiva

Es el caso de la aseguradora Das, que se apoya en una 'app' exclusiva para sus clientes, 'Proofup', que se instala en el móvil del menor y le permite capturar o grabar cualquier situación de acoso. "Desde capturas de pantalla a conversaciones de audio". Por una parte, esta información puede ser compartida con los padres, y por otra, se puede utilizar después como prueba ante quien proceda. "Queremos que sea el propio menor quien comunique la situación y sea dueño de su intimidad, no a un padre que esté controlando lo que hace su hijo porque eso es algo que rechazan los chicos", afirma Jordi Rivera, CEO de la compañía.

'Proofup' permite la localización del usuario y le da un 'chat' para comunicarse y compartir archivos y la opción de tomar capturas de pantalla o grabar conversaciones incluso de voz. "Permite crear archivos que puedan ser custodiados por un tercero de confianza y da acceso a un abogado que valore cómo actuar en cada caso". Lo mejor, aseguran las aseguradoras consultadas, no es embarcar al cliente en un proceso legal con denuncias y demás, sino optar por la mediación directa que disuada al responsable de la difamación y le haga retirar el material.

"Si con la 'app' se pueden capturar evidencias muy al principio, mejor. Porque lo habitual es que cuando el tema llega a los padres ya está muy avanzado y se han borrado pruebas", advierte Rivera, que lanzó el producto tras un estudio de dos años con escuelas y familias.

Das también incluye en su poliza atención psicológica al menor y a la familia, en caso efectivo de acoso, y servicio de petición de borrado en redes sociales. Y su actuación comienza con la mediación ante la escuela, donde existen ya protocolos de actuación previstos y que este año, al menos en Catalunya, se han reforzado.

Suplantación de identidad

La pionera en asegurar contra el ciberacoso fue, sin embargo, Zurich, que lanzó en mayo del 2016 junto con Telefónica un seguro que cubría "la vida digital" de sus usuarios, desde el ciberacoso a la suplantación de identidad en la contratación de servicios financieros online, por ejemplo, si alguien pide un crédito en nombre del cliente.

Su poliza también utiliza un 'software' que utiliza 'big data' para localizar palabras clave que puedan dar a entender que se está produciendo ciberacoso, pero que asimismo funciona como un programa de control parental clásico, de los que limitan el tiempo de uso, geolocalizan el móvil, restringen aplicaciones o webs y dan informes de actividad.

Arag también comercializa un producto similar desde hace casi un año, con una línea de asesoramiento legal que puede usar tanto la víctima como el acusado de haber realizado un delito. Axa incluye coberturas sobre fraudes en compras en internet en polizas generales y Caixabank cubre el robo de identidad en internet en su servicio de asistencia jurídica.

Cobertura en polizas generales

<span style="color: rgb(0, 0, 0); font-family: PTSerif-Regular; font-size: 16px;">Todas las compañías consultadas coinciden en que pese a lo innovador de la propuesta, no ha tenido éxito entre sus clientes, por lo que la mayoría ha optado por incluirla como cobertura de sus pólizas más generales de asistencia jurídica. "Los clientes se interesan, pero no lo contratan. Tampoco a las aseguradoras vienen a buscarnos por temas digitales. Los clientes, más que ir contra un tercero en una demanda, lo que quieren son soluciones rápidas para que el material difamatorio deje de circular. Y buscan quién se lo puede resolver", advierte Iván Jiménez, responsable de desarrollo de negocio de Arag.</span>