Los obispos exigen rapidez y transparencia con la pederastia en pleno escándalo de los Maristas

Un trabajador borra una pintada en el muro del colegio de los Maristas de Sants-Les Corts.

Un trabajador borra una pintada en el muro del colegio de los Maristas de Sants-Les Corts. / periodico

EL PERIÓDICO / BARCELONA

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La Conferencia Episcopal Tarraconense (CET), que aglutina a todos los obispos catalanes, ha mostrado este jueves su total condena a cualquier modalidad de abuso contra menores y se ha comprometido a "luchar contra esta plaga que destruye tantas infancias", tras la denuncia de presuntos abusos sexuales ocurridos en el colegio de los Maristas de Sants-Les Corts de Barcelona.

En la primera reunión que mantiene la Tarraconense con la participación del nuevo arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, los prelados han querido dejar constancia de todo su apoyo, atención y compañía a las víctimas de abusos, "incluso en el caso de delitos que puedan estar prescritos penalmente". El papa Francisco, como sus predecesores, ha mostrado su condena ante abusos a menores, han subrayado los obispos catalanes.

Los miembros de la CET han reiterado que las normas de la Iglesia piden actuar con rapidez y decisión ante las denuncias, garantizar la transparencia y actuar con tolerancia cero, y entre las normas figura apartar de sus funciones a las personas acusadas y ofrecer toda la colaboración a la Justicia y autoridades civiles.

LABOR EDUCATIVA

Con todo, los obispos han remarcado que los Maristas y otras instituciones realizan una labor social y educativa y "siempre se han dedicado a la atención y a la promoción de los niños", de la que se han beneficiado las diócesis catalanas.

"El trabajo de las comunidades educativas, de los maestros y educadores y de los padres y madres que confían en estas escuelas, no puede quedar cuestionado por estos casos que todos deploramos y condenamos", ha afirmado la Conferencia. De la misma manera, ha señaladp, la red de instituciones educativas que la Iglesia pone al servicio de las familias "no puede ser sometida a una permanente sospecha".