La búsqueda de una vacuna contra el zika alía a Brasil y EEUU

Un trabajador municipal fumiga para acabar con el virus de zika en un barrio de Recife (Brasil).

Un trabajador municipal fumiga para acabar con el virus de zika en un barrio de Recife (Brasil). / periodico

EDU SOTOS / RÍO DE JANEIRO

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Una conversación telefónica es todo lo que necesitaron la semana pasada la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, y su homólogo norteamericano, Barack Obama, para alcanzar un plan de combate conjunto contra el virus zika. En las próximas semanas, ambos gobiernos impulsarán el principal proyecto de investigación conjunta a escala mundial con el objetivo de encontrar una vacuna efectiva y definitiva contra el temido zika.

Obama y Rousseff acordaron a creación de una comisión bilateral que coordinará el trabajo de los científicos de la red norteamericana National Institutes of Health y el Instituto Butantan de Sao Paulo, el mayor centro de investigaciones biomédicas de América Latina.

TIEMPO ESTIMADO

Pero el optimismo inicial tras el anuncio, contrastó con las sobrias declaraciones el lunes del ministro de Presidencia brasileño, Jaques Wagner: “Aunque ya hemos iniciado los trabajos de investigación junto a los Estados Unidos, el tiempo estimado para que los científicos den con la fórmula para la vacuna es, con mucha suerte, de tres años aunque podría requerir hasta cinco”. 

No obstante, el director del Instituto Butantan, Jorge Kalil, apuntó que los trabajos de varios años de los científicos brasileños sobre la vacuna del dengue, otra enfermedad trasmitida por el mosquito Aedes Aegypti, podrían contribuir enormemente a reducir el tiempo de producción de una primera vacuna experimental contra el zika.

FÁCIL PRODUCCIÓN

Esta misma idea fue defendida por el responsable de los estudios de la vacuna en la Universidad Laval de Quebec (Canadá), Gary Kobinger,  quien cree que la primera etapa de pruebas en humanos podría empezar en agosto. “Hay que estar preparado para lo peor. Sin embargo, esta vacuna sería fácil de producir y se podrían redoblar los esfuerzos para alcanzar niveles muy altos en poco tiempo”, declaró Kobinger.

Brasil es el país más afectado del mundo por la propagación del zika. Se estima que terminará en este año con al menos 1,5 millones de casos. De momento, el país amazónico tiene unos 4.200 casos de microcefalia en bebés asociada al zika. Sin embargo, el casi total desconocimiento del virus, sumado al hecho de que en el 80% de los casos resulta asintomático, dificulta conocer el verdadero impacto en el país.