La ayuda a la cooperación se desploma

España nunca ha estado cerca de destinar a cooperación internacional el tan prometido 0,7% de la renta nacional bruta desde los 80. Pero, por lo menos, hubo un tiempo que parecía que al menos lo intentaba. Los datos de la Secretaría de Estado de Cooperación mostraron ayer que este compromiso, que hoy día solo cumplen 5 de los 22 países donantes, está cada año más lejos. Recorte tras recorte desde el 2008, la ayuda estatal de todos los ministerios y administraciones se ha estancado en el 2011 en el 0,4%, 4.233,71 millones de euros, tras un tijeretazo de 1.035 millones con respecto al año pasado. Nada menos que un 24, 4%. ¿Causa? Oficialmente: la crisis económica y financiera internacional.

PRIORIDADES / El departamento de Trinidad Jiménez se ha fijado como prioridades la agricultura y la seguridad alimentaria, por considerar que la lucha contra el hambre es uno de los elementos fundamentales para combatir la pobreza y cumplir los objetivos del milenio. El PP advierte de que este recorte «drástico» hay partidas destinadas a salud, educación y sanidad. «El gobierno de PP dejó en un 0,23% del PIB el porcentaje destinado a cooperación», replicaron fuentes de Asuntos Sociales.

Con la crisis como excusa los ajuste aún son más alarmantes en las autonomías. En Catalunya el presupuesto es de 22 millones de euros, con un descenso con respecto al 2010 del 40%. No obstante, el director general de Cooperación al Desarrollo de la Generalitat, Carles Llorens, aseguró que el Govern mantiene el compromiso internacional «incluso con la voluntad de llegar al 0,7%, aunque en este momento pueda parecer broma». «Hemos intentado poner sentido común en un marco de recorte muy importante. Estamos haciendo malabarismos para que ningún proyecto importante quede descabalgado, unificando proyectos, haciendo ahorros, buscando financiación privada, y priorizando el asesoramiento en temas como la salud, gestión del tráfico y la movilidad. Entendemos que la cooperación en estos momentos es algo estratégico», agregó LLorens.

«MÁS SOMALIAS» / Francesc Mateu, presidente de la Federació de ONGD de Catalunya, cifró el «recorte real» en un 55%, lo que ha cercenado la convocatoria de programas de sensibilización y cooperación y de contrato de personal. Mateu vaticinó que muchas onegés desaparecerán y programas destinados a combatir el hambre se verán muy afectados. «La crisis, la especulación sobre los cereales y la falta de ayudas nos harán ver más somalias», advirtió.