SANT ANDREU

Ofensiva contra el incivismo

Vecinos de la plaza de Can Portabella exigen más vigilancia policial para frenar el gamberrismo

Plaza de Can Portabella, donde los vecinos dicen que hay altercados.

Plaza de Can Portabella, donde los vecinos dicen que hay altercados.

BEATRIZ PÉREZ / BARCELONA

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Vecinos de Sant Andreu denuncian el "incivismo" que se ha adueñado de la plaza de Can Portabella desde principios de verano. Acusan de los altercados a un grupo de unos 10 jóvenes, de entre 15 y 18 años, que muestran con el vecindario una "actitud intimidatoria", en palabras de Carles Merceder, presidente de la Associació Veïnal Sant Andreu Sud. Son chavales que se suelen instalar, por las tardes, debajo de los edificios que dan a la plaza.

"En julio, durante unas semanas, empezaron a pasar más los Mossos y agentes de la Guardia Urbana y los jóvenes desaparecían. Pero ahora vuelven con la misma actitud", se queja Mercader. "Tiran cosas a los balcones de las viviendas, se pelean entre ellos y, alguna vez, han enseñado alguna navaja", añade. Este vecino explica que el grupo también ha tenido problemas con el Casal de Barri Can Portabella, ubicado en la plaza, ya que en alguna ocasión han entrado "en tromba" en el recinto.

Los vecinos aseguran que esta pandilla de adolescentes conflictivos no son de Sant Andreu, sino que proceden del barrio de Bon Pastor y de Badalona. Otros matizan que el mal comportamiento no es exclusivo de todos los jóvenes, sino solo de algunos. En general, eso sí, desconfían. Por ello algunos pidan mantener el anonimato al hablar con los periodistas.

"Nos han dicho que vendrían a hablar con nosotros [con la asociación vecinal], pero de momento no lo han hecho", relata Mercader, quien recalca que el ayuntamiento debe "garantizar" la seguridad del vecindario y "solucionar" este problema. Porque el conflicto, que no ha sido algo exclusivo del verano, continúa.

Más vigilancia

El distrito, por su parte, asegura que la plaza de Can Portabella es desde el junio pasado un "punto referente" de Guardia Urbana y Mossos d'Esquadra, algo que, según la Administración, ha "rebajado la conflictividad".

Paralelamente, el consistorio ha puesto a trabajar en la zona, durante los meses de julio, agosto y septiembre, a un equipo del Servei de Gestió de Conflictes que contactó con los adolescentes y les hizo un seguimiento. También reconoce que estos jóvenes, en ocasiones, han tenido "conductas incívicas" y han producido "desperfectos en el mobiliario urbano". Por eso, asegura el distrito, a partir de ahora un equipo de educadores de calle se desplazará a la plaza para trabajar con ellos y orientarlos sobre las actividades para jóvenes que el consistorio ofrece.

Rosa [nombre ficticio] es una vecina de la zona que prefiere no desvelar su identidad. "Este verano los jóvenes se quedaban en la plaza hasta altas horas de la noche. Alguna vez saltaron la valla de acceso a nuestra comunidad y utilizaron la piscina", se queja. Esta vecina, que habla en nombre del grupo de vecinos de la zona, asegura que también tiraron piedras a los cristales de las viviendas.