CITA CON LAS URNAS

¿Y si el presidenciable no es Puigdemont?

Josep Rull (derecha) y Jordi Turull, en un acto en el 2017.

Josep Rull (derecha) y Jordi Turull, en un acto en el 2017. / JOAN REVILLAS

Fidel Masreal / Silvia Martinez

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El mensaje clave de la campaña electoral de Junts per Catalunya no es otro que el de votar para "restituir al 'president' Puigdemont". De ahí no salen. Es una idea que incentiva al independentismo a concentrar el voto para plantar cara al cese de Carles Puigdemont y de todo el Govern mediante la aplicación del artículo 155 de la Constitución. Un mensaje de combate en defensa del que consideran 'president' legítimo a todos los efectos.

Sin embargo, la decisión del juez del Tribunal Supremo (TS) Pablo Llarena de retirar la euroorden de detención contra el exjefe del Govern, deja al cesado 'president' y a sus compañeros del que era el Ejecutivo (los 'exconsellers' Toni Comín, Clara Ponsatí, Meritxell Serret y Lluís Puig) en una difícil situación. Puigdemont puede vivir libremente en Bélgica y desplazarse a cualquier lugar del mundo, pero si pone los pies en territorio español será automáticamente detenido.

Su intención es la de poder regresar y ejercer como 'president' si la suya es la lista más votada. JxCat confía en ganar las elecciones y lograr superar a ERC. El barómetro de GESOP para EL PERIÓDICO marca para ellos una tendencia al alza notabilísima de los posconvergentes.

La decisión, del partido

Si se produce finalmente el 'sorpasso', habrá que tomar una decisión. Según fuentes de la cúpula del PDECat, será el partido el que tome las decisiones a partir del 21 de diciembre. El propio Puigdemont ha dado instrucciones precisas a su partido para que abra un período de negociacioens con el resto de partidos.

Es cierto que todo depende del resultado, pero la excarcelación este lunes de los cesados 'consellers' del PDECat Josep Rull y Jordi Turull abre un nuevo escenario. Hasta ahora, no existía un nombre claro en la lista electoral que pueda ejercer el papel de presidente o presidenta. Y cuando se le pregunta a Elsa Artadi, la jefa de campaña (que no tiene, por cierto, una especialmente buena relación con el partido, del que se ha dado de baja) su respuesta es que no hay alternativa a Puigdemont. Ni aunque ERC gane las elecciones.

Pero para el partido, Rull y Turull (pese a proceder de familias distintas) son una gran alternativa. Ambos tienen una gran experiencia política y pueden ejercer sin ningún lugar a dudas el papel que Marta Rovira jugará en ERC si Oriol Junqueras no puede acceder a la presidencia de la Generalitat porque está en la cárcel.

¿Rull o Turull? No se ha llegado todavía a este nivel de concreción, pero lo cierto es que Rull representaría un perfil de 'president' más social y Turull, la victoria total del aparato convergente, el que fue vencido por Marta Pascal en el congreso fundacional del 2016 del PDECat. Turull, además, goza de muy buenas relaciones con Esquerra.

La decisión correcta

Mientras, Puigdemont mantiene la línea dura de ataque contra la justicia española. Puigdemont y los cuatro 'exconsellers' que le acompañan en Bélgica están convencidos de que su decisión de trasladarse a ese país fue correcta y consideran que, si algo confirma la retirada de la orden europea de detención y entrega, es el fracaso de la estrategia del Estado español.

"Ha retirado la orden de entrega porque tenía miedo de que el juez belga decidiera que lo que hemos hecho es perfectamente normal en un sistema democrático. El Estado español ha intentado que Bélgica ejecute en nombre de unos principios europeos acciones que claramente van en contra de los principios europeos", ha explicado el cabeza de lista de JxCat durante su segunda rueda de prensa en Bruselas tras la celebrada el 31 de octubre.

"Miedo a perder"

“Al Estado español le ha entrado miedo a perder, a hacer el ridículo. Tiene miedo de la mirada del mundo”, ha añadido agradeciendo al equipo de abogados, encabezado por Paul BekaertChristophe Marchand y Michele Hirsch el trabajo llevado a cabo. Es más, si hay algo que ha fracasado, ha subrayado, no ha sido la vía independentista, sino “la ausencia de política del Estado español para hacer frente a la crisis constitucional" que vive España. "Esto es un fracaso". "El sistema español, 30 días después de emitir una euroorden por unos delitos gravísimos, se ve obligada a retirarlo para evitar el ridículo", ha destacado.

Apenas un día después de que Llarena notificara a la Fiscalía de Bruselas la retirada de la euroorden, los cinco políticos catalanes se han presentado ante los medios de comunicación en Bruselas como los grandes ganadores del pulso político que mantienen desde hace meses contra el Ejecutivo de Mariano Rajoy. "Hemos ganado y el Gobierno español ha perdido. La mirada del mundo les ha dado miedo", ha resumido Comín desde la sala de conferencias del Husa President Park, cerca de la estación del norte y lugar escogido para su segunda rueda de prensa en Bélgica desde que aterrizaron en el país a finales de octubre. "Empiezan retirando una eurooden y terminarán retirando el 155 y la represión", ha añadido el 'expresident', recalcando que hubiera preferido un pronunciamiento de la justicia belga.

"Persecución política"

Según Puigdemont, la última decisión judicial corrobora que o bien el Gobierno español no era consciente de que, "tenían una bases muy débiles" para sostener la euroorden, o, simplemente, era "una chapuza jurídica". En todo caso, demuestra a su juicio lo que siempre han denunciado: "Que estamos ante una persecución política que se administra con ritmos y criterios políticos". Si el Estado no se ha atrevido al final a proseguir con la euroorden, añaden, "es porque sabe que los delitos de rebelión y sedición no son aceptables".

Al hilo de esto, el 'expresident' se ha preguntado por qué siguen en prisión preventiva el exvicepresidente Junqueras, el 'exconseller' de Interior Joaquim Forn, a Jordi Sànchez y a Jordi Cuixart si ya no hay orden europea contra quienes están en Bruselas. "Cuando la justicia la controlan ellos son muy valientes, pero cuando no pueden controlar toda la cadena ya no son tan valientes y saben que pueden hacer el ridículo", ha criticado el líder catalán.

Incógnita sobre su regreso

Lo que no ha dejado claro Puigdemont es si regresará finalmente a Catalunya tras las elecciones del 21-D. "Tenemos la intención de volver y sobre todo las ganas de volver. Otra cosa es que eso pueda ser posible. Como no existen las garantías, antes de tomar esta decisión lo tendremos que pensar muchas veces", ha justificado. Es decir, como ya ha advertido en las últimas semanas en diversas entrevistas, antes de plantearse el regreso quieren garantías de que no irán a la cárcel y de que habrá un proceso electoral normal. "Si la justicia española cierra los casos penales contra nosotros y deja libres a los que están en la cárcel, estaremos felices de regresar y hacer campaña", ha añadido Ponsatí.

Paradógicamente, Puigdemont ha asegurado también que, si salen elegidos en las elecciones del 21-D, tomarán posesión de su acta que "legítimamente" habrán "ganado en las urnas", aunque también ha indicado estar dispuesto a quedarse en Bélgica a vivir para siempre. "Desde el momento en el que tomo mis decisiones, estoy preparado con todas las consecuencias", ha contestado. Tras la retirada de la euroorden, el 'expresident' y los cuatro 'exconsellers' han dejado de estar vigilados por las autoridades belgas. Tras leer el auto del Supremo, su abogado asegura que no ve motivos para que las autoridades españolas remitan una nueva euroorden.