Melgar se compromete a actuar contra "desobediencias o desprecios a la Constitución"

El futuro fiscal general del Estado, Julián Sánchez Melgar, dijo este martes no llegar a comprender "por qué debe respetarse la ley en una parte del Estado y no en otra", en referencia al proceso independentista que se ha vivido en Catalunya y que culminó con la declaración unilateral de independencia. El todavía magistrado de la Sala Segunda del Tribunal Supremo se comprometió a actuar "serena y ordenadamente" frente a "desobediencias y desprecios a la Constitución" ante la comisión de justicia del Congreso que debe validar su designación al frente de la Fiscalía General.

Sánchez Melgar optó por un intervención larga, estructurada por puntos, en la que repasó su trayectoria profesional, desde que se acercó al mundo jurídico como secretario judicial y desde el 1983 como juez. Situó en la República la primera referencia a la fiscalía que aparece en una Constitución española y en un tono pausado se comprometió a actuar con autonomía respecto del Gobierno que le propone hasta que llegó a lo que llamó "uno de los problemas más graves" que vive la democracia: lo ocurrido en Catalunya.

En primer lugar, señaló que la fiscalía "no tiene nada que decir respecto a las modificaciones de la Carta Magna" que se realicen dentro de los cauces legales, es decir, tal y como prevé su texto. Y dicho eso hizo una advertencia: "Si se reiteran las desobediencias o desprecios a la Constitución, sus autores se encontrarán con la serena y ordenada actuación de la Fiscalía. No alcanzamos a comprender por qué debe respetarse la ley en un parte del Estado y no en otro". 

Tras afirmar que la fiscalía nunca criminalizará ideologías, sino "conductas delictivas", el futuro fiscal general hizo suya la frase de Theodore Roosevelt de "ningún hombre está por encima de la ley y nadie está por debajo de ella". Melgar la dejó ahí y no incluyó su continuación: "no pedimos permiso a ningún hombre cuando le pedimos que la obedezca".

Blanquerna y Garzón

En su turno, la diputada del PDECat Lourdes Ciuró le recordó la paradoja de que los condenados por el asalto a Blanquerna sigan en libertad y dos 'exconsellers' y los responsables de la Assemblea Nacional Catalana (ANC) y de Òmnium Cultural estén en prisión. Les recordó la parte de la resolución del magistrado del Tribunal Supremo Pablo Llarena relativa a que su objetivo es crear una república indenpendiente catalana, para concluir que los cuatro "están en prisión por ser independentistas". Y llegados a este punto le preguntó si la fiscalía pedirá su puesta en libertad o "va a seguir considerando como violencia, que nunca ha habido en el proceso, cualquier iniciativa política que pretenda el proyecto independentista".

La respuesta del futuro fiscal general seguro que no fue la esperada por la diputada. Se limitó a decir que "el independentismo se tratará nada más que desde el punto de vista jurídico", porque "no se trata de recriminar ideas, sino las acciones que sean contrarias a la Constitución y que supongan la comisión de delitos".

Y en cuanto a Blanquerna, respondió que qué se le podía decir a él de "terrorismo de extrema derecha", cuando él presidió la sala del Tribunal Supremo que elevó la condena de los implicados en el ataque. La suspensión de la pena la ha decidido el Tribunal Constitucional al admitir su recurso de amparo.

En cuanto a su trayectoria recordó que fue el ponente de la doctrina Parot, pero la decisión la adoptó el pleno de la Sala Segunda del alto tribunal, y que en el juicio al juez Baltasar Garzón en el que participó fue en el de la memoria histórica, done el magistrado fue absuelto, no en las escuchas de la Gürtel por el que se le inhabilitó.