PSOE y PSC se reconcilian y acuerdan su nuevo vínculo

Más de cuatro meses después de que se acercaran a la ruptura como nunca antes, a raíz de la dimisión de Pedro SánchezPedro Sánchez y la traumática abstención ante Mariano RajoyMariano Rajoy para evitar unas nuevas elecciones, el PSOE y el PSC han sentado este viernes las bases de su nueva relación. Atrás queda el peligro de separación entre ambos partidos. El recién pactado vínculo de las dos organizaciones "hermanas", que se representan entre sí dentro y fuera de Catalunya, no difiere en exceso del que existía hasta ahora, salvo por dos importantes novedades.

La primera alude a la participación de los socialistas catalanes en las primarias para elegir al secretario general del PSOE, que se celebrarán en mayo y enfrentarán a Sánchez, Patxi López y, salvo sorpresa mayúscula, Susana Díaz. En las anteriores elecciones internas, en julio del 2014, los militantes del PSC, que es un partido autónomo, votaron a través de su propio censo, al que en principio no tiene acceso el PSOE. Esta vez no será así. Para tomar parte en el proceso de mayo, deberán inscribirse en un censo destinado específicamente a las primarias.

La dirección de los socialistas catalanes, encabezada por Miquel Iceta, ha aceptado este medida, mientras que uno de los candidatos a convertirse en el nuevo secretario general del PSOE, Sánchez, la ha criticado con dureza por tratarse, a su juicio, de un sistema similar al del voto "rogado", por el que las bases catalanas tendrían que pedir permiso para participar en las primarias.

"Los militantes del PSC que cumplan con los mismos requisitos exigidos a los del PSOE conformarán un censo específico para todo el proceso congresual. Los responsables de organización del PSOE y el PSC determinarán el procedimiento para que los afiliados del PSC trasladen su voluntad de incorporarse a dicho censo", señala el comunicado, pactado entre las dos organizaciones durante la reunión, adelantada por EL PERIÓDICO, que las comisiones negociadoras de las dos formaciones han celebrado este viernes.

El texto no se caracteriza por su concreción, y tras el encuentro, que se prolongó durante varias horas en la sede del PSOE, en la madrileña calle de Ferraz, fuentes de los dos partidos evitaron ir mucho más allá de lo que ahí queda expresado. "Nosotros vamos a intervenir en todo el proceso en las mismas condiciones que los militantes del PSOE, aunque ahora hay que establecer cómo se formula técnicamente el procedimiento de participación", señaló a este diario el alcalde de Cornellà, Antoni Balmón, uno de los miembros de la comisión del PSC, junto al secretario de organización, Salvador Illa, y la diputada Meritxell Batet. Por parte del PSOE, los negociadores fueron el portavoz de la gestora, Mario Jiménez; la eurodiputada Elena Valenciano y el exsenador Paco Fuentes.

EL NUEVO ORGANISMO

La segunda gran novedad que trae consigo el acuerdo alude al papel que jugará el PSOE en la política de alianzas del PSC. Desde la dirección del primer partido se ha recordado durante los últimos meses que los socialistas catalanes tienen voz y voto en el comité federal, que decide los acuerdos en toda España, pero que la situación no se da a la inversa. Para superar esta asimetría, y sobre todo a raíz de la posibilidad de que los socialistas catalanes establezcan pactos con fuerzas independentistas, algo que suscita muchos recelos en el PSOE, se ha decidido crear una comisión de coordinación política, que estará formada por cuatro miembros de cada partido. En rigor, este órgano nació en el 2013, pero nunca se llegó a constituir. Ahora será el encargado de velar por las alianzas en Catalunya, tanto preelectorales como poselectorales.