EL VEREDICTO DE LAS URNAS

Se busca un presidente para España

Rajoy y junto a compañeros del partido en el balcón de la sede del PP.

Rajoy y junto a compañeros del partido en el balcón de la sede del PP. / periodico

GEMMA ROBLES / MADRID

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Elecciones generales 2015: El día después, en directo

■Todos los resultados de las elecciones 2015

Las urnas han hablado. Aunque ahora toque esmerarse durante semanas en traducir el mensaje que han pretendido lanzar a los políticos españoles. Hay resultado y una llamada desesperada a la ‘pactocracia’, después de cuatro años de rodillotensiones políticas y territoriales y multitud de reformas anticrisis por la vía del decreto. Hay también un ganador de las últimas elecciones generales, el popular Mariano Rajoy.  Mariano RajoyMenos obvio es que ese mismo nombre sea el del presidente del Gobierno de la décimo primera legislatura en España. A saber: el PP ha logrado 123 escaños, lejísimos de los 186 diputados cosechados hace cuatro años y demasiado distante de los 176 asientos en el Congreso que marcan la mayoría absoluta. Además, se han cumplido los negros augurios que veteranos conservadores hacían en la última semana. “¡Que no sumamos!”, enfatizaba alguno de ellos a este diario, hace tan sólo unos días, cuando calculadora en mano comprobaba que PP y Ciudadanos no reunían suficientes votos para garantizar la gobernabilidad, según los ‘trackings’ de último minuto.

Así ha sido. Si a los 122 escaños de Rajoy se le añaden los 40 de Albert Rivera el resultado se queda en 162 diputados. De entrada, no son suficientes para investir al candidato a la reelección en primera vuelta, en la que se requiere mayoría total. Para un segundo intento, bastaría entonces que los ‘síes’ para apoyar al jefe de los populares superara por un voto a los ‘noes’. Aunque Ciudadanos avalara a Rajoy, se da por hecho (salvo cambios de criterio en pro de la rápida estabilidad) que PSOE y Podemos, se opondrían a que los conservadores repitiesen en el poder. La tesis también es aplicable a Izquierda Unida, que aguanta en el Parlamento con dos escaños

Y resulta inimaginable que, con la que ha caído, los independentistas catalanes los independentistas catalanes(17 diputados entre ERC, con 9, y Democracia i Libertat, con 8), vayan a poner alfombra roja a La Moncloa a un político popular.

EL FANTASMA DE LA 'GRAN COALICIÓN'

 El socialista Pedro Sánchez se convierte en segundo en el podium electoral en votos y escaños. Tan cierto es que este secretario general llevará a sus espaldas haber obtenido el peor resultado en democracia de su partido en unos comicios legislativos, como que con sus 90 diputados (un buen puñado de ellos serán andaluces y extremeños, pues el resultado de estas organizaciones destaca), podría optar a la presidencia en caso de que Rajoy fracase en su intento. 

Es una opción. El líder del PSOE no quiso comprometerse a nada en su primera intervención pública tras conocerse el resultado. Se limitó a reconocer que el ganador de la noche era el PP y que, por eso, le correspondía la iniciativa de intentar la investidura. “A partir de ahí, agradezco de corazón a los votantes socialistas su apoyo. Hemos hecho historia, hemos hecho presente y el futuro es nuestro”. La frase, tan enrevesada como enigmática, deja abierta todas las posibilidades sin decantarse por ninguna.

En todo caso es más que previsible que el primer ‘toc toc’ que se oiga en las puertas de la sede de la calle Ferraz sea del propio Rajoy solicitando a Sánchez, como poco, una abstención. “Yo voy a intentar formar gobierno”, advirtió desde el balcón de la sede popular el ganador. Tampoco es descartable que en las próximas semanas a los socialistas les lluevan las presiones desde Europa y los mercados para facilitar una ‘gran coalición’, al estilo alemán. En principio, el PSOE se dice cerrado a una alianza con los populares. En las próximas horas -seguramente tras la reunión de Sánchez con los suyos-, se sabrá si esa negativa incluye también abstenerse en una investidura y sí, yendo más allá, se intenta gobernar.

¿ELECCIONES ANTICIPADAS?

Para que esta tesis sea realista, sería crucial un guiño de Podemos, IU y otras fuerza políticas. También tendría que contar Sánchez, si se atreviera a intentarlo, con la complicidad de independentistas y/o nacionalistas. Todo un sudoku a resolver por delante. A favor tendría Sánchez que los socialistas han tejido en los últimos años hasta seis pactos con casi todas las fuerzas de la oposición para, en caso de que dieran los números, derogar las leyes más polémicas del PP, entre otras la de educación. Prácticamente un manual de intenciones que ya está elaborado. En contra, las exigencias que podría encontrarse sobre la mesa para ser investido, que pueden ser de difícil digestión para el socialismo.

Pablo Iglesias, desde Podemos, no logró la “remontada”.  Pero sus 69 escaños constituyen un resultado más que digno y en su mano estará que haya un presidente de izquierdas, si se diera el caso. Por el momento, anoche ya remarcó como “inaplazable e indispensable” para sentarse a discutir que se garantice una reforma de la ley electoral, otra de la Constitución y el impulso de una moción de confianza ciudadana para que, en dos años, examine al Ejecutivo. Si entre unos y otros no son capaces de cuadrar el círculo, las elecciones anticipadas tomarán protagonismo. Tiempo para reflexionar hay. Por haber, hay hasta presupuestos hechos