Geometría variable

¡Señor Rajoy, venga a escuchar!

Votantes esperando para depositar la papeleta, el pasado 9-N.

Votantes esperando para depositar la papeleta, el pasado 9-N.

JOAN TAPIA

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Presidente Rajoy:

El economista liberal Luis Garicano le ha pedido en el Financial Times que se vaya. Cree que usted no puede resolver los problemas de España. No le pido lo mismo porque ganó con mayoría absoluta, es moderado (por lo general) y no veo alternativa en su partido. Hoy he leído en titulares que ha decidido cambiar su estrategia sobre Catalunya y que vendrá el sábado para «explicar mejor mis razones y mis argumentos».

Le aconsejaría que esta vez no viniera a predicar sino a poner la oreja. A escuchar. El señor Mas le acaba de ganar por 3 a 0. Primer gol, caer en el grave error de recurrir también el invento de la seudoconsulta. La cantidad de publicidad y de deseo de protesta generada por esta segunda prohibición habría costado mucho dinero. El segundo fue comparecer el miércoles para decir que no a todo. Sí, sí, eso entendí. El señor Mas ofrecía negociar el referéndum escocés y 23 asuntos y usted le contesto que si era para hablar del referéndum nada de nada. Podía haberse abierto a los 23 asuntos… y dejar que el señor Mas eligiera quedar como un radical o un blando. No, como con el pacto fiscal en septiembre del 2012, le ahorró el trabajo. Tercer gol, el desafinado ruido de la fiscalía que solo aúpa al president. Cuando 2,3 millones de personas se movilizan, apuntar al cabecilla es torpe. ¡Y no me hable de la independencia del fiscal, hay declaraciones de dirigentes de su partido!

El señor Mas le ha metido el 3 a 0 porque dedica el 100% de su tiempo y usted no invierte ni la décima parte del que le tocaría (el 20% es la aportación catalana al PIB). Ya se que la economía es su primera obligación y que en el PP hay líos pero Catalunya también es España.

¡Barcelona no es Brisbane, pero quédese a dormir! Venga el viernes tras el Consejo de Ministros y cene (Via Veneto, por ejemplo) con cinco presidentes muy distintos de cinco entidades económicas (Joaquim Gay, de Foment; Miquel Valls, de la Cambra; Antón Costas, del Cercle, Josep Lluís Bonet, de la Fira y Josep González, de Pimec). Escuche atentamente porque ninguno es separatista pero todos están alarmados. Y no les diga que una Catalunya independiente quedaría fuera del euro. Lo saben. Tampoco lo repita en público porque usted recogía firmas callejeras pidiendo un referéndum en toda España contra el Estatut y suena como si ahora dijera: pese a todo os tenéis que quedar, si os vais estáis  jodidos.

Las propuestas

El sábado podría desayunar con los directores de diarios en el modernista palacio que alberga la delegación del Gobierno y luego verse con el decano del Colegio de Abogados, Oriol Rusca; con el catedrático de Económía Josep Oliver, del grupo Europe G (no le propongo al presidente Antoni Castells para no politizar) y con la presidenta de Òmnium Cultural, Muriel Casals. Sí, créame es persona racional (y de familia bien de Sabadell).

Para relajarse podría almorzar en el Círculo Ecuestre, club de la Barcelona burguesa, con su presidente, Borja Garcia Nieto, y Sergi Ferrer- Salat (el hijo del empresario catalán que Manuel Fraga barajó para presidir el PP). Siga escuchando.

Y no debería irse sin hablar con Pepe Álvarez (UGT) y Joan Carles Gallego (CCOO). El objetivo de los sindicalistas no es volver a la edad media. Serían 24 horas rentables y además habría hecho buenas relaciones públicas. ¡Ah, eso sí, es conveniente que antes el lío de la fiscalía esté desactivado!

Disculpe el tono de la carta, está escrita por quien cree que un Estado plurinacional no es fácil (a usted le creará problemas en el PP) pero aquí y ahora, como decía Churchill de la democracia, es la peor solución… excluyendo todas las demás.