SONDEO DEL GESOP

CiU coge aire y recupera el liderato ante una Esquerra que pierde fuelle

RAFA JULVE
BARCELONA

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CiU volvería a ser la fuerza con más escaños en el Parlament y estos son algunos factores para intentar descifrar por qué. Uno: el 12 de diciembre, el president Artur Mas anunció el acuerdo con ERC, ICV-EUiA y la CUP sobre la fecha y las preguntas de la consulta de autodeterminación. Cumplía así con un punto de su programa electoral (pero aún está por ver si habrá referendo el 9 de noviembre) y satisfacía el contrato societario con una Esquerra que ha exprimido prácticamente del todo la fuga de votos convergentes. Dos: en aras del diálogo y pese al muro de PP y PSOE, los partidos soberanistas registraron en febrero una solicitud al Congreso para que permita a la Generalitat convocar la consulta. Tres: el llamado proceso catalán atraviesa en las últimas semanas una etapa más de llano, con menos tensión que en otros momentos. Y cuatro: dicen los gobernantes que sus medidas están dando frutos, que la crisis remite, y algunos ciudadanos empiezan a creérselo.

Cuando la alternativa de las elecciones plebiscitarias suena cada vez con más fuerza en medio de la insistencia del Govern con la consulta, CiU ha dado la vuelta a los sondeos, aunque eso no significa que la fuerza nacionalista pueda tirar cohetes.

Ya sea por el desgaste del Ejecutivo o como consecuencia del órdago por el Estado propio, o por ambos, la federación obtendría ahora 35 o 36 diputados en unos comicios autonómicos, es decir, 14 o 15 menos de los que tiene en la actualidad, según el  último Barómetro Político de Catalunya elaborado por el Gabinet d'Estudis Socials i d'Opinió Pública (GESOP). Ahora bien, en la parte positiva de su balanza, los nacionalistas pueden aducir que han frenado la tendencia a la baja, porque remontan en cuatro parlamentarios respecto de la anterior encuesta, y que han adelantado a ERC, que lograría 34 o 35 escaños, 13 o 14 más que ahora pero entre uno y cuatro menos que los previstos en octubre.

FIDELIDAD REPUBLICANA / Hay que viajar a enero del 2013 para encontrar una encuesta de este diario que otorgara el primer puesto a CiU. En aquel barómetro, esta fuerza obtenía de 40 a 42 escaños y superaba a Esquerra en un mínimo de 12. Sin embargo, en junio de aquel año los republicanos ya se pusieron en cabeza y los nacionalistas siguieron cayendo hasta que, en octubre pasado, tocaron fondo con una previsión de 31 diputados, una tendencia a la baja que se ha revertido, al tiempo que ERC empieza a recular y cada vez capta a menos ciudadanos que en el 2012 votaron a los convergentes.

El partido de Oriol Junqueras puede replicar que la situación actual es de empate técnico, pues los resultados son muy ajustados y Esquerra, aunque ha retrocedido ligeramente, sigue en cabeza en intención directa de voto con un 19,9%, 3,8 puntos más que CiU. Además, la fidelidad de sus electores es la segunda más elevada del espectro político (el 81,1%) y solo la supera la CUP (82,6%), que se asentaría con seis plazas en el hemiciclo del Parlament.

CIUTADANS SE AFIANZA / Por bloques, los partidos que acordaron la fecha y las preguntas de la consulta (CiU, ERC, ICV-EUiA y la CUP) sumarían un mínimo de 89 escaños y un máximo de 92, con los que rebasarían los simbólicos dos tercios del Parlament imprescindibles para acometer reformas legislativas de gran calado. En el anterior barómetro, el de octubre, es decir, antes del pacto por el referendo, este grupo de partidos aglutinaba entre 86 y 91 sillas, lo que evidencia el suave aumento de este bando después de haber fijado el referendo. Actualmente son 87.

En la franja política contraria a la consulta, Ciutadans sigue sacando músculo, se consolida como tercera fuerza en la Cámara catalana  con 17-18 representantes y aumenta el porcentaje de voto. Lo hace sobre todo a costa del PP, que sigue perdiendo simpatías y baja de 19 a 12-13 diputados, o sea, a niveles de 1999. El partido de Albert Rivera ha encontrado un filón en el de Alicia Sánchez-Camacho, especialmente por la gestión de la crisis económica que está llevando a cabo el Gobierno de Mariano Rajoy. De todos los votantes que tuvieron los conservadores en las pasadas autonómicas, hay un 28,1% que repetiría, pero ese es precisamente el mismo porcentaje de antiguos electores populares que ahora se cambiarían a Ciutadans.

POCAS FUGAS DEL PSC A ERC / Tampoco corren buenos tiempos para el PSC, que sigue desgastándose a cuenta del debate soberanista. Tras un enero convulso por la revuelta de tres diputados díscolos, las aguas socialistas parecen más calmadas. Sin embargo, el barco que comanda Pere Navarro sigue perdiendo simpatías: baja de 20 a 14 o 15 escaños y queda como quinta fuerza tras ICV-EUiA, que obtiene la misma horquilla de parlamentarios pero se sitúa cuarta por su mayor porcentaje de voto.

Muy pendiente de la crisis del PSC, ERC ha evidenciado en las últimas semanas con fichajes como el de Ernest Maragall su plan de arrebatar votantes a los socialistas. Sin embargo, solo el 3,6% de los exsimpatizantes de este partido se pasarían a ERC. El 8% optaría por Ciutadans, el 8,9%, por ICV-EUiA, y, ojo, el 43,7% votaría nulo, en blanco, está indeciso o se quedaría en casa.