El futuro de la monarquía

Urdangarin baraja la posibilidad de no declarar ante el juez Castro

Urdangarin y su abogado, Mario Pascual Vives, salen de los juzgados de Palma, el 25 de febrero del 2012.

Urdangarin y su abogado, Mario Pascual Vives, salen de los juzgados de Palma, el 25 de febrero del 2012.

MARISA GOÑI / PALMA
JESÚS G. ALBALAT / BARCELONA

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La rampa de los juzgados de Palma se prevé más cuesta arriba que hace un año para Iñaki Urdangarin. Acude hoy a su segunda cita ante el juez José Castro, que investiga el caso Nóos, con un dilema: declarar o callar. Fuentes próximas a la familia real aseguran que está barajando la posibilidad de acogerse a su derecho a no declarar para reforzar la estrategia de la defensa de que se han vulnerado sus derechos fundamentales y pedir así la nulidad de la causa. Su abogado, Mario Pascual Vives, ya anunció que llegaría hasta el Tribunal Constitucional si no prospera el recurso ante la Audiencia Provincial de Palma, que hasta la fecha ha validado la instrucción de Castro.

La otra opción, sería tomar la palabra para mantenerse en la misma posición que hace un año, aunque con algún cambio sustancial. Estaría dispuesto a admitir las irregularidades fiscales y cumplir con Hacienda. De hecho, el yerno del Rey ha ordenado revisar toda su tributación para contraponerla a los informes de la Agencia Tributaria, que le imputó delitos fiscales no solo en Nóos, también en Aizóon, la sociedad mercantil que comparte con su mujer, la infanta Cristina, orillada, por ahora, en la causa. Manos Limpias, que ejerce la acusación popular, anunció ayer que no descarta solicitar de nuevo la imputación de la hija del Rey. Primero quieren escuchar a Urdangarin.

En caso de declarar, el duque de Palma mantendrá que los convenios suscritos con las diferentes administraciones públicas son legales y descargará la responsabilidad sobre su exsocio Diego Torres, la esposa de este y sus cuñados, los Tejeiro. Sobre las espaldas de Urdangarin ya no está solo su propia defensa, sino también la honorabilidad de la familia real. «El jefe era el Rey», llegó a afirmar el pasado sábado Torres, apoyado en documentos y correos electrónicos reveladores de la intervención del Monarca en los negocios de su yerno y de la supervisión y asesoría que recibía este de destacados trabajadores de la Zarzuela, como el secretario de las infantas, Carlos García Revenga, y el asesor jurídico de la Casa del Rey, José Manuel Romero. El letrado de Urdangarin ha apuntado la posibilidad de solicitar la nulidad de esos correos como prueba.

LA INFANTA NO LE ACOMPAÑA / A diferencia del año pasado, el duque de Palma parece que no estará acompañado de la infanta Cristina ni utilizará el palacio de Marivent para pernoctar. Se desconoce dónde pasará la noche y tampoco se descarta que pueda tomar un vuelo de primera hora de la mañana desde Barcelona con el objetivo de evitar la presión mediática. Quien sí estará a su lado será García Revenga, a quien el juez ha citado como imputado a la una del mediodía. El asesor de las infantas, que fue tesorero del Instituto Nóos, ha contratado como abogado a Enrique Molina, el fiscal que defendió al exjuez Baltasar Garzón y a la exmujer de Francisco Correa, el cabecilla de la trama Gürtel.

En el entorno del edificio de los juzgados se ha reforzado la seguridad, ya que varias organizaciones han convocado a los ciudadanos para hacer una pitada contra Urdangarin y la corrupción. A los efectivos de antidisturbios de las islas, se han sumado agentes desplazados desde la península.