Al contrataque

Chamanes

Hemos escuchado a los curanderos del siglo XXI usar el pánico al cáncer para echar por tierra el trabajo de nuestros mejores investigadores y facultativos

El naturópata Txumari Alfaro se dirige al público durante su alocución.

El naturópata Txumari Alfaro se dirige al público durante su alocución. / periodico

ANA PASTOR

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Es fácil jugar con el miedo del otro. Es sencillo aprovecharse del pánico que le produce a cualquiera saber que te puedes morir, que una enfermedad como el cáncer está recorriendo tu cuerpo saltando de célula en célula. Estos días hemos escuchado a los curanderos del siglo XXI usar ese pánico en diferentes foros para echar por tierra el trabajo de nuestros mejores investigadores y facultativos. El esfuerzo de aquellos que se dejan la vida por sus pacientes.

Ha ocurrido por ejemplo en el congreso de Barcelona titulado: 'Un mundo sin cáncer, lo que tu médico no te está contando'. Allí escucharon a una madre desesperada preguntar qué puede hacer por su hija que sufre cáncer de mamá. Txumari Alfaro, ponente de ese foro, le respondió: "Nada. La terapia es no hacer nada. Solamente tienes que ser consciente de la realidad. Con eso los médicos te dirán que han bajado los marcadores tumorales y te bajarán la medicación porque no la vas a necesitar". Como por arte de magia.

Una amiga que es oncóloga me escribió horrorizada al ver ese vídeo. Ella es de esas doctoras que vive en la vida de sus pacientes. De las que acompaña, abraza, aconseja, orienta. Es de esas médicas que está siempre presente. En las lágrimas de alegría, en los temblores del diagnóstico, en la supervivencia y también en la tristeza profunda del "se acabó". Pero sobre todo está en la investigación, en la terapia que funciona a la primera y en la medicación que hay que cambiar hasta dar en la diana.

Traficantes de miedo

Una especialista que me recuerda que el cáncer de mama está en tasas de curación cercanas al 85 por ciento. Por su manos han pasado pacientes que terminaron falleciendo pero también los que la ciencia, los tratamientos y su propia lucha les han proporcionado años de vida normalizada. Son esos casos los que omiten los curanderos que trafican con el miedo y la incertidumbre. Los desalmados que responden a la madre atemorizada: no haga usted nada para luchar contra el cáncer.

Es cierto que mucha gente fallece por culpa del cáncer. Es la primera causa de muerte en nuestro país entre los hombres y la segunda entre las mujeres. Pero también es cierto que la investigación ha avanzado y se está consiguiendo reducir la mortalidad. Según los datos de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), a pesar de que en la última década han aumentado en España los casos de cáncer, se ha conseguido rebajar el número de personas fallecidas. Y las causas son, según los expertos, básicamente tres: prevención, campañas de diagnóstico precoz y también los avances terapéuticos. Ni rastro de los chamanes que venden remedios mágicos y falsas esperanzas.