Jornada de reflexiones

Había pensado dedicar la jornada previa a las trascendentales elecciones del jueves a lo que mandan los cánones, esto es, a reflexionar; en mi caso y por deformación profesional, a reflexionar sobre las propuestas culturales de cada partido. Ya saben, la cultura, o mejor, la Cultura: ese monotema presente en cada debate y cada titular, ese punto fuerte en cualquier programa, el asunto crucial que rige campañas, sacude mítines, decanta votos y… Vale, vale, ya me siguen. Hoy tengo la ironía al nivel de nuestra clase política.

 Visto el éxito, por tanto, decidiré de otra forma el voto y optaré por pasar el miércoles reflexionando en torno a tres ensayos que ya han empezado a sonar. El primero, y no es broma, habla de pulpos e inteligencia. De pulpos, jibias y calamares, para ser exactos, y de cómo parecen haber desarrollado un complejo sistema nervioso y una conciencia superior cuya evolución es tan ajena a la de los vertebrados que sólo empezamos a atisbarla. Como dice en el libro, titulado 'Otras mentes' y publicado por Taurus, el filósofo y buceador que lo ha escrito, Peter Godfrey-Smith, esta pasmosa aproximación a los cefalópodos “es quizá lo más cerca que estaremos de encontrar a un alienígena inteligente”.

He decidido dedicar la jornada previa a las elecciones a tres ensayos que han empezado a sonar

El segundo texto, 'De la traïció', es obra del pensador israelí Avishai Margalit y resulta tan adecuado en estos tiempos que invita a aplaudir a los editores de Arcadia por haberlo publicado. Auténtica disección filosófica de la traición, tanto la personal (el adulterio) como la política (alta traición), la obra de Margalit distingue entre relaciones humanas densas y ligeras para analizar algo que podría resumirse en un célebre aforismo (por no decir un tuit y complicarme) según el cual “Si no hay amor, no puede haber traición”.

 La tercera apuesta por la reflexión de esta columna es 'Cinegráfics', de Matteo Civaschi y Matteo Pavesi: una divertida y adictiva historia del cine en ilustraciones, infografías y pictogramas, que empieza sintetizando el séptimo arte en diez escenas y acaba por presentar 101 películas en cinco segundos. La editorial que lo ha lanzado, la nueva Flow Press, sólo edita obras de no ficción gráfica, o lo que es lo mismo, libros esencialmente visuales. Voten por ella, láncenle sus tentáculos: palabra que ni mancha ni traiciona.