Alimentación y dietas

Es país para gordos

Carro de la compra lleno de productos en un supermercado.

Carro de la compra lleno de productos en un supermercado.

LUCÍA ETXEBARRIA

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El otro día aparecí en un programa de televisión y dije que tres personas podían comer por 35 euros de la semana comida sana. Me lo discutieron, así que aquí va mi lista de la compra para una semana:

2 kg. de manzanas: 2, 19 euros.  Cesta kiwis: 2,50. Bandeja plátanos: 2,59. Aceite oliva: 4,35. Dos 'tetrabricks' de leche de soja: 1,40. Bolsa de medio kilo de muesli: 1,54. Medio kg. de  quinoa: 2, 80. Botella vino Sangre de Toro (vino muy bueno, por cierto): 4 euros. Un kilo de tomates: 0,99. Medio kilo de zanahorias: 0,85. Espinacas, un manojo: 0,99. Repollo 2 kg: 1,80. Medio kg. de cebollas: 0,80. Pasta, 1 kg.: 0,75. Lentejas, 1 kg. 1,80. Garbanzos, 1 kg.: 1,45.

Total: 28 euros. Aún me sobran siete euros.

Hablo de una dieta vegana pero si alguien no se atreve a ser vegano, puede invertir esos ocho euros en huevos y queso. Y aun así le sobrará dinero.

PESO RAZONABLE

Llevar una dieta sana, como se ve, es barato. Yo le garantizo que comiendo lo que he citado en esta litsa y haciendo ejercicio se mantendrá usted en un peso razonable. De hecho, yo he pasado la menopausia, hago muy poco ejercicio y tengo una talla 42. Entonces, ¿por qué somos el segundo país de España con más obesos? ¿Por qué, según una encuesta realizada por la OCU, los españoles gastamos como media 150 euros al mes en intentar adelgazar?  Por una razón muy simple: para disfrutar de nuestro ocio necesitamos comer y beber.

 En el 'Estudio sobre el ocio con amigos', el 87% de los españoles encuestados aseguró disfrutar de su tiempo libre con una bebida alcohólica en la mano. Y el 84% lo acompaña con una comida.

SALIR DE TAPAS

Nuestro gasto medio en bebidas alcohólicas es de 114 euros al año: le dedicamos una cuarta parte del gasto anual. Y el CIS de junio del 2016 reflejó que en el 41,6% de los casos, la comida es el pretexto que ponemos para matar el tiempo. Salir de tapas, cañas, 'pintxos' o raciones es la actividad más común en los jóvenes de entre 25 y 34 años (61%). Y como buenos amantes de las tradiciones, ir al bar de siempre es el "ocio ideal" (para el 83%), ya sea con amigos (81%), la pareja (51%) o, en menor medida, la familia (52%).

Y claro, bebemos alcohol (que engorda), comemos comidas altas en grasas saturadas y en sal (la sal, junto al alcohol, propician la retención de líquidos). Ignoramos además que en muchos restaurantes echan azúcar a las salsas, a la mayonesa, al tomate frito (truco de cocinera de toda la vida).

 Y luego, ya en casa,  comemos comida procesada. Miren las etiquetas. El jamón de york lleva azúcar. ¡Azúcar! Flipante, ¿no? También lo llevan los zumos, las salsas, hasta los potitos infantiles para menores de seis meses (aunque debería estar prohibido, pues la OMS indica que es peligrosos) Y un día nos asustamos, nos gastamos una pasta en hacer una dieta milagro, sufrimos el efecto rebote, engordamos…

FRUTA, VERDURA, ACEITE Y VINO

Tenemos la inmensa suerte de vivir en un país en el que la fruta y la verdura, el aceite de oliva y el vino son baratísimos. En uno de los países en los que más sanamente se puede comer en el mundo por menos dinero. Pero no lo aprovechamos. Comemos mal y en exceso. Y luego, claro: diabetes, problemas cardíacos, cáncer. Todo tipo de ENT ( Enfermedades no transmisibles) causadas por la mala alimentación.

Hace 25 siglos, el padre de la medicina, Hipócrates de Cos, ya sabía que la alimentación tiene una influencia decisiva en nuestra salud. Que tu medicina sea tu alimento y tu alimento tu medicina. Con dos dedos más de cabeza y un poquitín más de tiempo estaríamos todos más sanos.