La Liga de Tito

Soy de los que se alegra cuando los éxitos del Barça siguen tras el relevo de LaportaporRosell,y de los que celebró queTitodecidiera dar un paso adelante cuandoPepse fue.

Ya sé que son mucho más llamativos los odios y las fobias, los héroes y los villanos, las rupturas con sus facturas y lecturas, pero a mi me siguen pareciendo mucho más éticas y poéticas las transiciones ordenadas. Y no es cuestión de ser rosellista o laportista. Es cuestión de ser del Barça y tratar de entender que la continuidad del triunfo nos hace bien. Como en todo, siempre hay más partidistas que barcelonistas, que tiñen de criticas, bulos y recelos cualquier éxito que encabece quien no es santo de su devoción. Allá ellos. Al tema.

La juntaRosellacertó pensando enVilanovacomo primer entrenador. Y, aceptando,Tito fue generoso con sus jugadores ya que en vez de subirse a la cresta de la ola queGuardiolasurfeó, y dejarles con alguien sin manual de instrucciones, él vio pasar la épica y se volvió a poner el chándal.

Los jugadores, muchos de ellos agotados de la intensidad de la etapa anterior, lo celebraron y quisieron reivindicarse desde septiembre en una primera vuelta portentosa.

Tito,confió y recuperó a jugadores comoPedrooAlves,y todos creímos que iba a tener el temple para comandar la renovación tranquila de una plantilla que ya el año pasado dio muestras de fatiga. Pero las adversidades en forma de recaídas médicas y de excesiva comodidad y autogestión del grupo en algunos momentos de la temporada, no han ayudado a que todo el proceso haya sido redondo.

Faltan cosas. Una hoja de ruta clara para ver cuál es la capacidad de mando y el proyecto de futuro deVilanova,si tal y como nos dice, él tiene la fuerza y el ánimo para encabezarlo. Decisiones que tal vez no serán muy populares pero que le servirán para ganarse el respeto que consiguióPepcuando el primer día ya dijo que para su proyecto deportivo no contaba ni conRonaldinho, ni conDéco,ni conEto'o.

Titodebe ser sincero y generoso, y si físicamente no está en condiciones debería asumir que un club como el Barça no se puede dirigir por teléfono desde Nueva York; y la junta directiva, tener un plan de emergencia más sólido que el que ha exhibido esta temporada. La reestructuración no debe esperar; y, sí, hay problemas lógicos para hacer bien está transición, pero de momento,Titoy la junta han asumido el reto. Es por ello que esta liga conseguida me hace especial ilusión.

Todos sabemos que ya no somos el mejor equipo de Europa y que el Bayern está a un gran nivel y va a ser el rival a batir en los próximos años, pero este equipo que nos ha dado tanto sigue siendo campeón. A un montón de puntos de distancia del Madrid deCristianoyMourinhoen un año lleno de dificultades. Como dijoRosell,está es la liga deTitoy de todo el barcelonismo.

Asumamos con orgullo nuestro presente, disfrutemos de este título y trabajemos ya en la reconstrucción. La transición no puede demorarse más. No afrontar los retos a tiempo es poner la primera piedra del fracaso. Es ahoraTito.Felicidades campeón.