Al contrataque

Tapándome la vergüenza

Firma del pacto de gobierno entre Artur Mas y Oriol Junqueras en el auditorio del Parlament, el pasado diciembre.

Firma del pacto de gobierno entre Artur Mas y Oriol Junqueras en el auditorio del Parlament, el pasado diciembre. / periodico

Jordi Évole

Jordi Évole

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Por motivos laborales, la semana pasada estuve en Finlandia. Y un español que vive allí me preguntó qué tal iba lo de la independencia de Catalunya. Me soltó que, con tanta contradicción, está hecho un lío. Me hice el sorprendido y, para fardar de patria, le dije que el asunto está clarísimo. Y se lo expliqué. Se lo expliqué en una sauna típica del lugar, para que no se notara que me estaba haciendo sudar.

Le conté que, primero, CiU y ERC pactaron una declaración de soberanía para el derecho a decidir que no gustó a la oposición. Sobre todo, a su líder,Duran Lleida, quien propuso reiniciar el proceso para que la declaración obtuviera el apoyo de más partidos. Con lo de volver a empezar, algunos creyeron que lo que quería Duranera queMasregresara a Madrid para pedir un pacto fiscal y que luego se celebrase una mani multitudinaria, para revivir aquel tiempo tan feliz en que los soberanistas parecían estar juntos cuando a lo mejor estaban revueltos. Pero no,Duranno pretendía eso. Lo que quería era que la apuesta por la independencia perdiera peso en la declaración para ganarse el apoyo del PSC, un partido que tampoco es independentista, como el líder democristiano. Está claro, ¿no?, pregunté retóricamente a mi compañero de sauna mientras yo sudaba cada vez más. Y seguí largando.

Tras las quejas deDurany del resto de la oposición, CiU y ERC cambiaron la declaración para el derecho a decidir. Y el PSC siguió discrepando, e hizo otra declaración. Lógico, ya que los socialistas catalanes están a favor del derecho a decidir el Estado federal pero no la independencia. Además, el PSOE está en contra del derecho a decidir. Por eso se presentan juntos. Normal. Tan normal como queDuran Lleida, que no es independentista, esté con los conververgentes, o que Esquerra, que es independentista, secunde a Convergència i Unió en el Govern de la Generalitat.

Debatir es inconstitucional

¿Alguna duda, colega?, pregunté a mi compañero de sauna. Y el tío hizo cara de estar perdiendo el norte pese a vivir en Finlandia, pero yo seguí largando.

Iniciativa hizo otra declaración a favor del derecho a decidir. Y su líder,Joan Herrera, lo tiene claro: si hay referendo, no sabe si se inclinará por la independencia. Y por si existía alguna confusión, que lo dudo, la CUP también hizo declaración. Está por el derecho a decidir de todos los Países Catalanes, lo que clarifica aún más el asunto. Aunque la declaración más clara fue la deAlbert Rivera,de Ciutadans. Se declaró partidario de que el Constitucional impida el debate en el Parlament sobre la soberanía de Catalunya para el derecho a decidir. Natural, porque todo el mundo sabe que debatir es inconstitucional. Y se rumorea que el PP también está preparando una declaración sobre el derecho a decidir. En concreto, sobre el derecho a decidir dónde pones el dinero. Igual la escribe un talBárcenas, le comenté al español que vive en Finlandia mientras me tapaba la vergüenza con una toalla que había en la sauna.