Cerdos que corren, tartas voladoras

Iosu de la Torre

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En el pueblo navarro de Arazuri, muy cerca de Pamplona, se disputa cada verano la popular Carrera de Cutos. Es con esta palabra como llaman a los cerdos en Navarra. Un cerdo (animal) es un cuto. Desde los tiempos de transición viene celebrándose esta peculiar prueba 'atlética' los días 26 y 27 de agosto. Una docena de cuadrúpedos, jaleados por su amos, corren 450 metros por las calles y por el barro. Los diarios locales siempre han informado puntualmente de la competición en la que los competidores recibían los apellidos del gobernador civil de turno, luego delegado del Gobierno, de los diputados forales y los concejales más conocidos. La ansiedad contra enemigos imaginarios en nombre del cerdo llega hasta la actualidad con rivales deportivos. Navarra en fiestas es así de bruta, tan original que ha internacionzalizado también el Lanzamiento de Azada.

     En los años 80, sorprendía el titular del Egin:Roldán gana la carrera de cutos de Arazuri. Del Burgo llegó el último. El sinvergüenza que huyó a Laos. El presidente que dimitió por un pufo aunque sobrevivió en el PP deAznar. Otras veces el protagonista era el cerdo Balduz(el primer alcalde socialista de la democracia en Pamplona tras el experiemento con gaseosa deJavier Erice), o la cerdaOslé Oslé(concejala de Cultura por la que Balduz abandonó a su primera esposa).  Hubo carreras que ganóUrralburu, apellido de aquel presidente foral al que pillaron trincando de las arcas también forales. Más recientemente la cuta apaleada para ganar posiciones en la vertiginosa prueba fue bautizada comoYolanda Barcina, alcaldesa de Pamplona y hoy presidenta del Gobierno navarro.Barcinase impuso en la edición del 2009 por delante deManolo Lama. Me cuentan que este verano ganó el cutoRajoy, ¿una premonición para el 20-N? Pero se equivocan, Google rectifica al informante: el campeón del 2011 fueMourinho.MourinhoY es que en la cuenca de Pamplona son más del Barça que del Madrid.

     Hasta la democratización del nombre de los cerdos, los resultados de las carreras de cutos provocaban la carcajada de los propietarios de las piaras a los que nunca se les ocurrió bautizar a las bestias con el nombre de ningún respetable abertzale. Nadie recuerda al cutoIdígoras, al cutoTxapote, al cutoMortadelo. Ni mucho menos al cutoOtegi. Ni al cutoPermach.

     Ahora que parece que los tiempos están cambiando en Euskalherria se anuncia para el próximo verano el Concurso de Lanzamiento de Tartas de Nata. El primer ensayo los protoganizaron tres valientes en Toulousse conYolanda Barcina. ¿Qué hay detrás de un tartazo a una presidenta navarra nacida en Burgos? Los de la izquierda abertzale dicen que el placer de castigar blandamente el apoyo el tren de alta velocidad. Hace años, la autovía de Leizarán (la que puso más cerca a Navarra y Guipúzcoa) se cobró algún muerto y losroldanessacaron mucha pasta con la excusa de que había que acentuar la seguridad de la obra. Tiros por tartas.

     Existe también el tartazo moral, el metafórico. Como el que pegó la propiaYolanda Barcinaa los contribuyentes navarros el día que se conoció que la entonces alcaldesa de Pamplona cobraba 70.000 euros anuales simplemente por pertenecer al consejo de la Caja de Ahorros transmutada hoy en Banca Cívica. ¿Cívica o Cínica? Como ella ,el anterior presidente del Gobierno navarro, algunos consejeros y concejales también recibían el premio. ¿Quién no deseó devolverle el tartazo? La rabia quedó en metáfora de bar.