CRÍTICA DE CINE

'Ganar al viento': la distancia sí importa

Pese a hablar de niños gravemente enfermos, Anne-Dauphine Julliand elude el chantaje emocional y privilegia una atmósfera de optimismo y vitalidad

Nando Salvà

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La periodista Anne-Dauphine Julliand, que perdió a su hija a causa de una patología incurable, canaliza su dolorosa experiencia a través de este documental que retrata pacientemente las batallas diarias de otros cinco niños gravemente enfermos. De semejante premisa es legítimo temerse lo peor -impudicia, voyerismo, chantaje emocionalmente- pero, aunque es cierto que su asunto de por sí inevitablemente condiciona al espectador a sentirse conmovido por el destino probablemente fatal de sus objetos de estudio, la directora casi siempre a la distancia correcta para contemplarlos -en concreto, siempre que la terrible música de la banda sonora no se lo impide-, sin instrumentalizarlos y privilegiando una atmósfera de optimismo y vitalidad.