BALANCE

Peralada cierra su mejor festival

Una gran 'Madama Butterfly' y la danza encabezan el éxito de las apuestas de una muestra que ha alcanzado un 92% de ocupación

Una escena de 'Madama Butterfly' presentada en Peralada.

Una escena de 'Madama Butterfly' presentada en Peralada. / periodico

César López Rosell / Peralada

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El vibrante espectáculo del debut en España de la compañía Acosta Danza cerró anoche la mejor edición del Festival de Peralada de los últimos años. Las 22 propuestas de la 31ª muestra del clásico del verano ha reunido a más de 26.000 espectadores y ha alcanzado un 92% de ocupación. El balance de público se corresponde con la calidad de los espectáculos ofrecidos, encabezados por una 'Madama Butterfly' de ensueño, con Ermonela Jaho como estrella de referencia en el rol de la protagonista, y las atractivas producciones de danza.

La climatología ocasionó el único problema de esta edición. Una tormenta obligó a suspender, a mitad de la función, el montaje de la ópera de Puccini, el pasado día 9, algo que no había ocurrido en los últimos 9 años. Oriol Aguilà, director de la cita del Alt Empordà, afirma que este fue uno de los momentos de mayor  frustración del festival, no solo por el esfuerzo realizado con el montaje sino también por la desilusión que sufrieron los espectadores.

Máxima puntuación

A pesar de este contratiempo Aguilà no duda en otorgar la máxima puntuación a este Puccini,  bendecido por la crítica y el público, pero por encima de todo valora la consolidación de un modelo de festival que se basa "en un proyecto cultural sólido" y alejado del titubeante eclecticismo de otras citas. "Hemos conseguido un equilibrio entre la ópera y el canto de primer nivel, la danza y las apuestas por la nueva creación, uno de los puntales de nuestro proyecto". En esta línea destaca la versión de 'Dido y Eneas' a cargo de la Academia de Ambronay, y el estreno de ‘'La straordinaria vita de Sugar Blood', ópera de Alberto García Demestres sobre la diabetes.

El paso de Juliette Binoche encarnando a la cantante Barbara ha sido uno de los hitos del festival

La iglesia del Carme se ha convertido en el marco idóneo para las grandes voces. Los recitales de Pretty Yende, Ainhoa Arteta (en la velada de homenaje a Victoria de los Ángeles con el estreno de dos canciones de sus poemas), Julia Lezhneva y Gregory Kunde han reafirmado una tradición de excelencia en la seguirán "perseverando". También en el campo de las alianzas con la OBC, Liceu o las formaciones de Euskadi de este año, a las que se ha añadido una estimulante colaboración con la Orquesta del Capitol de Toulouse. "que continuará para contribuir a posicionarnos estratégicamente en la región transpirenaica".

También ha subido el listón en la danza, con el espectáculo inaugural dedicado al legado de Maurice Béjart, la versión de 'La Bella y la Bestia' con música de Chaikovski y la revolución cubana de Acosta Danza. El paso de Juliette Binoche y el pianista Alexander Tharaud, autor intelectual del mágico espectáculo sobre el mito de la cantante Barbara, ha sido otro de los hitos de esta edición, "con mucha presencia de público francés en un festival que ha tenido una cierta mirada francófona".

Aforo completo

Diez espectáculos han conseguido el 'sold out' en la taquilla:  los dos de 'Butterfly', Kunde, Arteta, Lezhneva, 'Sugar Blood', y las citas de pop con Battiato, Malú, Jarabe de Palo y Bryan Ferry.  "El público ha disfrutado mucho, pero nuestra obsesión no es ni incrementar el número de citas ni el de los espectadores de gran fidelidad que tenemos, sino en mantener el proyecto con la calidad y creatividad actuales", concluye un satisfecho Aguilà.