RECITAL DE UN ICONO POP

El Dúo Dinámico, 50 años y subiendo

Ramón Arcusa y Manuel de la Calva celebran su buen momento, tras pasar por el festival Sonorama, y se disponen a recorrer sus más de cinco décadas de carrera en el Liceu

El Dúo Dinámico, hoy.

El Dúo Dinámico, hoy. / PEDRO CERVERA

JORDI BIANCIOTTO / BARCELONA

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El Dúo Dinámico vuelve crecido: su llamativo paso, este verano, por el festival Sonorama, de Aranda de Duero, compartiendo cartel con figuras otras generaciones, como Love of Lesbian, Quique González y Manel, ha ayudado a cambiar su percepción como evento nostálgico. Son patrimonio colectivo del pop y así se presentan este domingo en el Liceu (19.00 horas), recital con las entradas agotadas desde hace varios meses.

Reconocen que estaban “un poco preocupados”, señala Manuel de la Calva a este diario, por ir a actuar ante un público adolescente y veinteañero. “Pensabas: ‘¿cómo te recibirán?’ Pero fue muy bien: ¡conocían las canciones!”, celebra. “Ir al Sonorama nos ayudó a descubrir a grupos valiosos, y ellos quizá nos descubrieron a nosotros”, añade Ramón Arcusa. La guinda la puso Eva Amaral cuando subió a cantar con el Dúo ‘Amor de verano’. “La tuvimos que subir un tono para ella. No la conocíamos personalmente, pero la admiramos: Amaral tiene canciones que van a quedarse en la historia”, destaca Arcusa.

HACIENDO LO SUYO

Vuelven al Liceu en uno de sus mejores años, estiman, estirando sin manías una gira de 50º aniversario que se prorroga temporada tras temporada. Ya vamos por el año 57º. “¡Nos hemos plantado en los 50!”, bromea Arcusa. No hay motivos para tirar la toalla. “A nuestra edad tendríamos que estar en casa leyendo el diario, pero eso no nos va: aún tenemos muchas cosas que decir, y sin hacer la competencia a nadie seguiremos haciendo lo nuestro”, argumenta De la Calva. La última palabra “siempre la tiene el público”.

Estamos ante una institución musical que dio sus primeros pasos a finales de 1958, en los albores del rock and roll. “Dicen que nuestra versión de ‘Cowboy’, de Renato Carosone, fue el primer rock que se grabó en España”, apunta Arcusa. Aunque ellos manejaban muchas influencias pre-rockeras, de Frank Sinatra (‘Quisiera ser’ es puro swing) a The Platters. Desde la distancia, Arcusa considera que el dúo “era más valiente” en sus primeros tiempos, antes de establecer su identidad de éxito. “Hacíamos armonías vocales diferentes, jazzísticas, y luego nos fuimos acomodando en un pop más fácil, tipo Neil Sedaka o Paul Anka”, estima. Fueron habituales de las ‘jams’ del club Hondo, en la calle Muntaner, donde improvisaron éxitos pop con espontáneos como Tete Montoliu.

EL AMIGO JULIO

Lo dejaron en 1972, “creíamos que para siempre”, y emprendieron otros rumbos que acabaron confluyendo en la figura de Julio Iglesias‘Soy un truhán, soy un señor’ lleva su firma y la siguen luciendo en sus recitales. “En aquella época Julio se estaba separando y la canción le iba perfecto”, recuerda De la Calva, que expresa algunas diferencias con él en el modo de afrontar la carrera musical. “Para Julio lo primero siempre ha sido cantar y, luego, la familia. Nosotros hemos tenido otra manera de hacer”.

Al Dúo le gusta recordar que su regreso, en 1978, tuvo mucho que ver con este diario. “Fue Antonio Asensio quien nos hizo volver para actuar en las galas de presentación de EL PERIÓDICO en Madrid y Barcelona”, recuerda Arcusa. Poco después llegó ‘Resistiré’, una canción con cierto aire a ‘I will survive’, el éxito de Gloria Gaynor, ¿o no? “La idea del título vino de Manolo, que se inspiró en una frase de Camilo José Cela, ‘hay que resistir’. La letra es parecida a la de ‘I will survive’, pero creo que es superior. Las canciones americanas suelen ocuparse más de la música que de la letra”, considera Arcusa.

Y aunque nadie lo diría viendo sus fotos y la energía que desprenden en sus conciertos, Arcusa y De la Calva se disponen a cumplir 80 años este invierno, uno en diciembre y el otro en febrero. “Nos encontramos bien para la edad que usted dice que tenemos”, ríe Arcusa. “Nuestra voz no ha cambiado y es un milagro”. Para De la Calva, lo fundamental “es tener ilusiones; si no, estás muerto”.

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