El manierismo español brilla en la reapertura del centro

Tras 20 meses de cierre por obras, el Museu Marès abre hoy con la sección de escultura (con piezas del siglo IV a.C. al siglo XX) totalmente reformada, con novedades en la colección y con una gran rehabilitación arquitectónica. Los cambios son tantos que «solo por verlos ya vale la pena venir», sugiere Pilar Vélez, directora del centro.

La rehabilitación, además, ha dado paso a tres salas nuevas, dos recogen obras que ya se exhibían, como los objetos dedicados a la virgen de Montserrat y las piezas propias del vestuario masculino del siglo XIX, y la tercera expone las armas de la colección de Frederic Marès, que hasta principios del 2010 se mostraban en el Museu Militar de Montjuïc.

Pero aquello que no hay que perderse bajo ninguna circunstancia, según Vélez, es «la sala Manuel Álvarez  dedicada al escultor renacentista y, sobre todo, la escultura de Sant Roc de Alonso Berruguete», una pieza que recoge todas las características formales del artista más destacado del manierismo español del XVI. Imposible obviar el virtuosismo de las manos y la melancolía del rostro.