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Paco Roca recuerda en viñetas el exilio republicano en Francia

Una viñeta de 'El ángel de la retirada' muestra el éxodo de los refugiados republicanos hacia Francia.

Una viñeta de 'El ángel de la retirada' muestra el éxodo de los refugiados republicanos hacia Francia.

ANNA ABELLA
BARCELONA

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La joven Victoria Valiente, hija de exiliados de la guerra civil procedentes de Barcelona, tiene sueños en los que un soldado republicano la acompaña en 1939 por la playa de Argelès sur mer, en el sur de Francia, donde tras la derrota se alzó uno de los campos en los que recalaron miles de refugiados que huyeron de las tropas franquistas. Paco Roca, Premio Nacional de Cómic 2008 por el álbum Arrugas, que en El faro ya relató una historia sobre la guerra civil y el exilio francés, vuelve a indagar en la misma temática en El ángel de la retirada (Bang ediciones), una novela gráfica, con guión del autor francés de novela policiaca Serguei Dounovetz, recién publicada en Francia y que llegará este jueves a España.

«La memoria histórica y la guerra civil se han convertido en un género dentro del cómic -constata Paco Roca-. No hay más que ver obras como Las serpientes ciegasEl arte de volar o los álbumes de la guerra de Carlos Giménez. Las guerras sacan lo mejor y lo peor de las personas, hay héroes, historias... La guerra civil es la más cercana que tenemos y aún hay gente que la vivió y nos puede dar información de primera mano. El cómic también la está descubriendo».

Roca plasmó el relato de Dounovetz, que vive en Montpellier, casi como una continuación de El faro (publicado en el 2004 y reeditado en el 2009 por Astiberri), tanto en la temática como en el dibujo. Ambas obras son en bitonos. «El blanco y negro da más credibilidad a la historia, al dramatismo de la realidad del derrotado y recuerda al documental».

En El faro narraba la llegada de un refugiado, inspirado en el soldado almeriense Francisco Valiente (es casualidad que comparta apellido con la protagonista de El ángel de la retirada), a un faro del sur de Francia, donde un anciano le devuelve la ilusión de vivir. Roca se había quedado «con las ganas de contar el trato que los franceses dieron a los españoles, un tema poco conocido y, en Francia, aún tabú. Ellos supieron darle la vuelta a unos hechos poco heroicos igual que hicieron con el colaboracionismo con los nazis», relata.

LECHE PARA LOS COCHINOS / El ángel de la retirada surgió de una idea de la Colonia Española de Béziers, en el sur de Francia, que celebra 120 años de apoyo a los emigrantes llegados del otro lado de los Pirineos. Desde que en 1880 llegaron los primeros trabajadores, huyendo de la miseria y la filoxera que ahogaban España, pasando por los que durante la primera guerra mundial suplieron a los franceses del frente y hasta los que, en plena posguerra, llegaban para trabajar en la vendimia.

Una escena del cómic recuerda esa época. En una de las viñetas, un granjero francés manifiesta que prefiere dar leche a «los cochinos en vez de a los españoles». El maltrato a los refugiados de 1939 resultó inmune al paso del tiempo.