El solar de la antigua Quirón acogerá pisos municipales para ancianos

El Ayuntamiento de Barcelona construirá un edificio que contará con 95 pisos con servicios para mayores, un centro de barrio, uno de ancianos y otro de jóvenes y un aparcamiento en el solar que ocupaba la antigua Clínica Quirón, cuyo edificio se demolió por el estado en que se encontraba tras muchos años de abandono y que ha dejado un solar ahora ya desescombrado.

El alcalde, Xavier Trias, visitó este jueves el solar para explicar el plan previsto de obras, que no comenzarán hasta la segunda mitad del 2016. El solar, de casi 12.000 metros cuadrados, fue comprado por la ciudad en el 2012  al Banco Santander. El Ayuntamiento sacará este trimestre a concurso el proyecto.

«Este lugar podía convertirse en un lugar de vergüenza que pasase años y años en una situación mala», ha reconocido el alcalde que ha asegurado que, si bien se tardará tiempo en hacer realidad el proyecto, éste está «atado» y se llevará a cabo «mande quien mande porque si lo tira para atrás quedará muy mal».

El ayuntamiento prevé invertir 17 millones de euros en este proyecto, a los que hay que sumar los 9,5 que pagó por la finca y los 650.000 euros que le ha costado derribar el edificio.

PISOS ADAPTADOS / La teniente de alcalde de Calidad de Vida y concejala de Gràcia, Maite Fandos, ha destacado que con las promociones inauguradas, las que se están construyendo y las proyectadas en este mandato, Barcelona dispondrá de pisos adaptados para ancianos. Las viviendas, que estarán gestionadas por el Patronato Municipal de Vivienda, contarán con unos 40 metros cuadrados de superficie divididos entre un dormitorio, un comedor-cocina y un baño adaptado.

Todos estarán equipados con alarmas centralizadas, zonas comunitarias, un servicio de lavandería de autoservicio y 65 plazas de aparcamiento de alquiler. Para acceder a una de estas viviendas se debe estar inscrito en el Registro de Solicitantes de Viviendas de Protección Oficial de Barcelona y cumplir, entre otros requisitos, los de tener más de 65 años y no ser propietario de una vivienda accesible.