Nadal: "Jugaré la Davis para ayudar al equipo a mantener a España en el grupo mundial"

Tras perder con Alemania en la Copa Davis este fin de semana (4-1), el capitán español, Carles Moyà, ha recibido una buena noticia. En septiembre podrá contar con Rafael Nadal, ausente de la primera ronda, al igual que David Ferrer, por cuestiones de calendario. "Faltan muchos meses para ello, pero mi ilusión es competir para ganar esta Copa Davis. Evidentemente, en esa primera eliminatoria no podía estar, pero si no hay ningún contratiempo ni ninguna lesión, sí que tengo toda la intención de estar en la eliminatoria para ayudar al equipo a mantener a España en el grupo mundial", ha declarado este lunes el número 1 en 'El partido de las 12' de la COPE.

El tenista manacorense se encuentra prácticamente recuperado tanto de la llaga en la mano como de las contractura de espalda que sufrió en la final del Abierto de Australia, pero aún no ha decidido si jugará el torneo de Buenos Aires, que empieza el lunes. "Estoy bien. He pasado otra revisión y he seguido con el mismo tratamiento desde que volví de Melbourne. Aún no he tocado pista ni he hecho ningún tipo de ejercicio, he estado solo reposando y he intentado hacer la rehabilitación adecuada para volver a jugar lo antes posible", ha afirmado.

Alemania elimina a España en la Copa Davis

Su intención es volver a la pista este mismo jueves. "Jueves y viernes voy a entrenar y, dependiendo de cómo vaya la evolución, en función de mis sensaciones y también de la opinión de los médicos, decidiremos si podemos empezar en Buenos Aires o tendremos que esperar al siguiente torneo", ha añadido sin ocultar sus ganas de volver a la pista porque, como él mismo ha afirmado en referencia a la final de Australia, "la mejor manera de olvidar es competir de nuevo".

"La peor hora y media en una pista de tenis"

Ya ha pasado más de una semana desde que cayó ante el suizo Stanislas Wawrinka, pero todavía le pesa la derrota. "Fue uno de los peores momentos posibles. Estar enfrente de una final de Grand Slam y 15.000 espectadores, en un partido al que llegas bien preparado, aunque el rival también... Creo que estaba listo para el reto después de haber pasado una semana complicada con la llaga en la mano, de llevar meses preparándome y con este torneo entre ceja y ceja. Haber hecho todo lo correcto para llegar al momento al que soñaba llegar, en buenas condiciones, y que ocurra eso, pues es parte de la vida del deportista. Hay que aceptarlo", ha declarado.

Nadal es consciente de que en ningún momento tuvo posibilidades de demontar el partido, a pesar de que los aficionados creyeron en sus posibilidades incluso cuando se le escaparon algunas lágrimas de impotencia. "Por dolor de espalda no hay lágrimas. Hay dolor de impotencia, de haber llegado hasta ahí y verme inhabilitado para poder competir. Evidentemente, son momentos complicados de aceptar, y más cuando estás en medio de la pista y sabes que no vas a ganar, que no tienes ninguna opción de ganar. Y tampoco tienes la intención de retirarte, porque es una situación complicada y muy desagradable retirarte de una final como esa", ha recordado. "Fue la peor hora y media que he pasado en una pista de tenis. Intenté llevarlo de la mejor manera posible, superarlo bien y terminar bien. Creo que era la única manera de salir al menos con la cabeza alta, que es lo que hice, y aquí estamos", ha concluido.