Ni la sombra del más mínimo 'feeling'

No nos ha defraudado el encuentro delpresident,Artur Mas, con la directora de TV-3,Mònica Terribas.Después del golpe de kárate que propinóMònicaal Govern como respuesta a los nuevos recortes sobre TV-3 que anuncióFrancesc Homs, esta entrevista tenía un plus superlativo. No sé siArtur Mas, y sus asesores, han calibrado bien esta circunstancia añadida. No sé si han sido conscientes de que el interés de este encuentro estaba centrado, casi exclusivamente, en el morbo de ver alpresident,cara a cara, con la díscola karateca. O sea, que todo lo concerniente a Catalunya, a las medidas para salir de la crisis,... todo lo que elpresidentfue lanzando como mensaje al país, quedó subsumido ante el ansia, la expectación, las ganas que los televidentes teníamos de ver cuándo abordaban,face to face, lo de TV-3.

Es verdad queMònicale hizo una entrevista. Le lanzó notables andanadas.«¿Hacia dónde nos lleva? ¿Nos lleva a ser una masía en Europa o a seguir siendo los masoveros de España? [...] Usted está atado de pies y manos. Dígame ¿usted puede gobernar? [...] ¿Se da cuenta de que solo les han votado el 18%, frente al 32% que se ha quedado en casa?».¡Ahh! Hacía tiempo que no veíamos unaMònicaasí ante un presidente. Pero la gran expectativa generada era el momento en que sacasen los dos modelos dela teva: el deMònicay el del Govern. YMònica, al final, planteó el asunto. Y lo hizo por la vía que más podía doler aMas:lo hizo citando unas palabras deAlicia Sánchez-Camacho:los recortes que anuncióHomshabían sido pactados previamente con el PP. ¡Ahh! AquíMaspuso cara de pocos amigos. Lo negó.«Los recortes los han aprobado todos los partidos políticos. Por unanimidad». Pero en el aire quedó la chispa queMònicapretendía: las tijeras sobre TV-3

las impulsa el PP.