Roberto Leal: "Yo fui ya 'celestino' con una pareja de amigos a los que casé"

A Roberto Leal, que acaba de ser padre, le apetecía probar en un formato de entretenimento alejado del estrecho corsé de informativos como 'España directo', el magacín que presenta en TVE-1. Y la primera cadena estatal le ha complacido poniéndole al frente de 'Hotel Romántico', el programa de citas de los viernes (22.10 horas)  

Parece que su hija ha venido con un pan debajo del brazo… Totalmente, pero mi hija ha venido con un hotel. Un hotel romántico y grande, como la niña, que pesó tres kilos y medio. Su madre es de Barcelona, yo soy de Sevilla y ella (se llama Lola) ha nacido en Madrid, a medio camino. 

¿Nervioso en el embarazo? Sí. Cuando grabamos el programa en Suiza, mi mujer estaba embarazada. Yo estaba en Davos, que está a dos horas y media desde Zúrich. Más dos horas y media de avión, son cinco horas en total. Lo hubiera pasado mal si hubiera dado a luz. Pero mi mujer, que también se dedica a esto (trabaja con Jon Sistiaga en 'Tabú'), me dijo que tenía que hacer este programa porque era una buena oportunidad para mi. Ella sabía que yo estaba deseando hacer entretenimiento

¿Cualquier cosa? TVE ha contado conmigo para otros 'castings'. Al final ha cuajado este porque decían que yo daba el perfil. Pero nunca te obligan a hacer nada que no quieras. Si me hubiera llegado un formato en el que no me viese lo habría hablado con ellos. No ha sido este el caso. No hubo 'casting', me dijeron que tenía que ser yo y adelante.

“En TVE nunca te obligan a hacer nada que no quieras”

¿Qué cree que han visto en usted para estar tan convencidos? No lo sé. Es muy feo decir eso de uno mismo. Creo que tiene que ver con la naturalidad y la cercanía con gente que ya ha vivido. No puede presentarlo alguien encorsetado. Nosotros salimos en el programa con camiseta y ropa de montaña. Ellos necesitaban alguien que tocase el corazón a los participantes porque al final hacemos de celestinos. No somos presentadores al uso. Yo hago de maestro de ceremonias.

Como el animador de los hoteles, ¿no? Es un buen símil.

¿Se ha inspirado en el Carlos Sobera de 'First dates'Es que es muy diferente. Ojalá me pareciera un poco a Sobera porque es un profesional como la copa de un pino, haga lo que haga. Pero esto no sentarte 10 minutos delante de otro en una mesa. A mi de todas maneras la ceja se me va para arriba desde pequeño (ríe). Algunas de las huéspedes me preguntaban si yo participaba también en el programa y si estaba en el 'casting'. “¡Ay qué pena!”, me decían.

¿Es duro competir con 'The wall' de Sobera y 'Me resbala' de Arturo Valls?Me está hablando de dos de los presentadores a los que yo sigo desde que empecé en esto. Veía a Arturo Valls en 'Caiga quien caiga' y me parecía un 'megacrack'. Y a Sobera lo veía en 'Al salir de clase'. No quiero hablar de competir con ellos. Es una lotería. Cada formato tiene su público. Soy amigo de El Monaguillo y cuando veo 'Me resbala' me río mucho. Pero los viernes veo 'Hotel Romántico'.

¿Han conseguido que brote el amor en el programa? Puedo adelantar que han surgido varias parejas. Y otras, que estaban con el germen del amor, se están viendo ahora fuera del programa. Las que se formaron continúan todavía.

¿Qué participantes le han sorprendido más? La historia de Mercedes me fascinó desde el principio. Llegó tímida porque tiene una historia muy fuerte detrás y que fue creciendo hasta convertirse en una de las protagonistas del programa. Me alegré mucho por ella.

“Nuestros huéspedes no son tronistas porque a esa edad no se sabe lo que se quiere”

Ustedes insisten en que este programa está lleno de verdad. ¿Quiere eso decir que sería la antítesis de formatos como ‘Mujeres y hombres… y viceversa’? No tiene nada que ver. Si se enamoran o no en ‘Mujeres y hombres…’ entiendo que lo harán, pero ‘Hotel Romántico’ es otra cosa. Aquí lo de mirar a las personas por dentro es verdad. Cuando se llega a determinadas edades se fijan en otras cualidades. El físico pasa a un segundo o tercer plano. Lo que me encanta es que ellos ya saben lo que no quieren. Y son muy sinceros a la hora de decirlo. Te hablan de verdad.

Los tronistas también… (Ríe) Hombre, son de carne y hueso. Nuestros huéspedes no son tronistas. A las edades de los tronistas, no se sabe muy bien lo que se quiere.

¿Con cuál de los numerosos cupidos televisivos se queda? Con Carlos Sobera, porque lo he seguido mucho. Es el que tiene más experiencia. Me encanta esa forma suya de llevar el amor desde fuera con una ironía sutil, fina, elegante y respetuosa. Cuando haces de celestino es difícil no pasar la barrera y no meterte donde no te llaman. Esto Sobera lo hace muy bien. El papel de celestino es complicado, pero yo lo fui ya con una pareja de amigos míos. Se casaron por lo civil y fui su ‘cura’. 

¿Sabe que figura en la lista de posibles presentadores del nuevo 'Operación Triunfo'? Me encantaría, como a todos. Yo he crecido con 'OT' y tengo la edad de Bisbal y Chenoa. Pero no me lo han propuesto. He leído mi nombre en los foros. En estas cosas siempre eres el último en enterarte. Pero no me ha llegado nada por los pasillos.

'España directo' es uno de los pocos programas que funcionan en TVE. ¿Por qué cree que casi todos los formatos que estrena la cadena estatal fracasan? Me gustaría saberlo. Es verdad que últimamente los formatos no están teniendo suerte. Hay que intentar recuperar esa audiencia fiel que ha tenido años atrás. Cuando yo era reportero de 'España directo' llegamos a tener un 21% de cuota. 'Operación Triunfo' es una de las grandes apuestas, 'Masterchef' funciona y también algunas series. Pero yo no tengo las claves del problema.