Nuevo fútbol de pago: 'pay per dir'

Ha causado gran divertimento y excitación el gag deCrackòviasobrePep Guardiola: en vista de que está muy enfadado con TV-3, los reporteros dela tevase tienen que disfrazar de mexicanos de TeleMéxico para poder arrancarle alguna declaración, porque siPep advierte que son de TV-3 no dice ni pío y gira la cabeza mirando hacia Pamplona en lugar de hacia Sant Joan Despí. Efectivamente, ha sido un golpe divertido. Pero en casa nos ha gustado más el mordisco que le han dedicado aJaume Rouresexplicando el nuevo sistema de cobro que acaba de inventar. Consiste en que, a partir de ahora, no solo habrá que pagar por ver un partido -el famosopay per view- sino que también se cobrará a todo aquel que hable de fútbol, ya sea en el bar con los amigos, o en familia. Esta nueva modalidad se llamarápay per dir, y todo aquel que no la cumpla será desintegrado ipso facto con el colosal mando a distancia que poseeRouresen exclusiva. ¡Ahhh! Tremenda iniciativa: aunque provenga del humor y del sarcasmo deCrackòvia, no es descabellado pensar que acabe implantándose de verdad. La crisis es terrible. Y loscompromisos de pago del imperio Mediapro, la arborescente deuda del grupo, comienza a tener tintes apocalípticos.

LA RED CONTRA BUENAFUENTE .-

Parece que no ha gustado nada a los internautas, a los usuarios de lagalaxia internet, la entrevista que le practicóBuenafuente(La Sexta), en la noche del lunes, a la ministra de Cultura,Ángeles González-Sinde. Toda la red bulle de ira. Esperaban que la cosiera a dentelladas por la famosaley Sinde. Pero el encuentro, en lugar de acabar con la ministra sangrando por el suelo, acabó divinamente: la conversación sirvió como bandeja para que ella pudiera explicar y justificar sus iniciativas. Hombre, no practicaBuenafuente-no lo ha hecho casi nunca- la entrevista dura. Sus invitados no suelen salir del plató amoratados ni heridos. El estilo entrevistador deBuenafuentees otro: es una espuma, que también alberga buenas dosis de ironía. El único reproche que se le puede hacer alshowman, visto lo visto, es cuestionarle la elección de esta invitada. Tiene la señoraSindeahora mismo a todos los internautas en un grito, incluidoÁlex de la Iglesia, el director dimisionario de la Academia del Cine. Con este polémico bagaje, sentarla ahora en un plató es arriesgado. Sobre todo si se enfoca la entrevista para darle gusto a ella, y no a las masas encendidas.