tú y yo somos tres

La 'mossa' y la 'botifarra'

FERRAN MONEGAL

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Dentro de las macarrónicas tramas que caracterizan esa grotesca producción llamadaGran Nord (TV-3), acaban de proporcionarnos un momento que muy probablemente, sin ellos pretenderlo, podría iluminarnos. Se trata de una partida de cartas que juegan dos representantes de la pedanía de Nord contra dos del municipio de Fogony. Estas dos localidades, ancestralmente enfrentadas, dirimen sus diferencias jugando todos los años una partida debotifarra. ¡Ah! Labotifarra. Se trata, efectivamente, de un juego de cartas muy popular en Lleida, y muy particularmente en los dos Pallars. Mi buen amigo, y sublime actor,Carles Canutsuele entretenerse todos los veranos montando sensacionales partidas debotifarraen Gerri de la Sal. Es un juego que exige gran inteligencia, y al jugarse en pareja, o sea, en equipo, requiere cooperación y sobre todo perspicacia. Hay que estar muy despierto, y ser muy sagaz y espabilado. La partida que juegan enGran Nord, en cambio, es una verdadera calamidad. De entrada, ponen en el equipo de Fogony al caporalEstadella, que es un inútil total en el arte de labotifarra, y su pareja, la alcaldesaMargarida, le tiene que dar clases particulares, pero no sirven de nada. Y a mitad del juego, en vista de lo mal que lo hace, le sustituyeOriol Sisquella, un delincuente habitual que llega a la mesa esposado pero que juega como lo que es, un pillo, un truhán y, claro, su efectividad es bárbara. En el otro equipo, el equipo de Nord, está formado por la mossa d'Esquadra Annay la artesanaFrederica, que está embarazada. Hombre, la estampa que han logrado en esta timba es matadora. Una pobre embarazada y una mossa d'Esquadra con uniforme oficial, dándole al naipe y enfrentándose a una alcaldesa y a un bandido malhechor al que le tienen que quitar las esposas para que pueda coger las cartas. ¡Ahhh! Los que han dibujado este cuadro, este garito rural, seguramente no lo sospechan, pero les ha salido una parábola muy actual.

Ahora que las autoridades que gobiernan Catalunya y Madrid apuestan desesperadamente por el juego a gran escala, yo recomendaría a los guionistas deGran Nordque repitan la timba. Pero con otros jugadores. Los contrincantes deberían ser doñaEspe AguirreyArtur Mas, sentados a la mesa y jugándose Eurovegas a una partida debotifarra. Con la asistencia deSheldon Adelsonen calidad decroupierrepartidor de cartas. Naturalmente, marcadas.