ENTREVISTA

Carlos Santos: "La familia me ha dicho que en la serie me parezco a mi tía Ana"

El protagonista de 'Ella es tu padre' confiesa que hacer de mujer "ha sido más fácil" de lo que imaginaba porque en la primera prueba se sintió ya "como una señora"

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Juan Carlos Rosado / Madrid

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Carlos Santos se ha estrenado en su primer papel como mujer con 'Ella es tu padre', la telecomedia que emite Tele 5 los lunes (22.30). Aquí explica su experiencia en la piel de un padre de familia que se hace pasar por profesora de música para ver a sus hijos.

¿Ha aprendido mucho sobre la sensibilidad femenina con este papel? Sí, muchas cosas, y algunas muy útiles. 

¿Cómo aguanta las cuatro diarias de maquillaje y la hora de desmaquillaje? Puf! Llevo una prótesis de silicona desde debajo de los párpados hasta el escote, más la peluca y una malla en el cuerpo con rellenos. En las tetas llevo colonia para que me huelan bien los senos.

No habrá tenido que hacer 'casting'… Nunca me planteé hacer este personaje. La productora propuso mi nombre, me llamaron y me ofrecieron directamente el papel. No era un personaje para el que te pudieran hacer una prueba porque necesitas todo este proceso de transformación. Confiaron en mi a ciegas para hacerlo y llamaron a una empresa barcelonesa de efectos especiales que se llama DDT y que tienen un Oscar por 'El laberinto del Fauno'. Hicieron el molde y llegó el día de probar todo.

¿Y qué sintió la primera vez que le transformaron en Avelina? Hicimos una prueba de cámara improvisada, simplemente contando quién era Avelina. Y me sentí como si fuera una mujer. Si con todo esto que llevo te miras al espejo y no te ves como si fueras una mujer, mal vamos.

Robin Williams no podía moverse mucho en 'Señora Doubfire', pero yo sí"

¿Es una gozada para un actor hacer de mujer o más bien un suplicio? La productora ya tiene contratado el sicólogo para el problema de la bipolaridad porque es un personaje que estaba ahí y que no había ensayado. Surgió en el momento en que acabaron de vestirme y maquillarme: me miré al espejo y salió esta señora. Y eso me preocupa: había una mujer de 60 años dentro de mi (ríe).

¿El hecho de interpretar a una mujer le acerca al universo femenino? Una de las claves que hablamos con los guionistas y creadores es que realmente Avelina es como Superman y Clark Kent. Sergio es un tipo amargadete por lo que le está pasando y una vez que se disfraza de Avelina es como una fuerza de la naturaleza: todo lo que no se atreve a hacer en su vida normal lo puede hacer a través de ella. Lo de entender el universo femenino es una de las cosas que le van pasando al protagonista. Una de las cosas que más me gustan como actor de esta serie, y se lo he comentado a mis compañeras actrices, es que estoy haciendo las típicas secuencias que siempre he visto hacer a compañeras en otras series, como las conversaciones de chicas hablando de sus temas. Verte en ese universo es muy divertido porque siempre he estado en el universo masculino con mis personajes.

¿Pensó alguna vez en la posibilidad de travestirse cuando veía películas como 'Tootsie' o 'Señora Doubtfire'? No, como tampoco pensé ningún día ser Luis Roldán en el cine ('El hombre de las mil caras'). No te lo planteas. Cuando lo ves, lo tomas como un reto muy divertido, como ha sido efectivamente para mi. Sin ánimo de ser prepotente, he de decir que ha sido más fácil de lo que me imaginaba porque esa señora estaba ahí. No sé si por mi madre, por mi abuela o porque soy muy fijón.

De hecho siempre se ha dicho que todos los hombres tienen una mujer dentro… Pues yo la tengo, se lo puedo asegurar.

¿Se ve tan parecido al guapo Rubén Cortada como para ser su hermano en esta ficción? Ya se dice en la serie que somos hermanastros. Cuando me vieron a mi de Sergio, para el hermano se dieron cuenta de que necesitaban un tío tan guapo como él. Se quedaron cerca y llamaron a Rubén.

Me recogen a las cinco de la mañana y llego a casa a las 10 de la noche"

¿Ha tenido algún referente en la cabeza? No he tenido ningún referente y he tenido todos. Desde 'Señora Doubtfire' han pasado muchos años y el maquillaje de Robin Williams era otro, espuma de látex. Todo esto ha avanzado mucho. En la película se ve que él no puede moverse demasiado, mientras que yo tengo mucha movilidad porque no siento la prótesis.

¿Le ha dicho algún pariente que se parece a alguien de su familia? Sí, sí. Hay cosas que les recuerdan a mi madre y otras a mi tía Ana, que curiosamente no es familia directa. Es la mujer de mi tío, del hermano de mi madre. Yo he metido cosas de mi abuela y de mi madre. Van surgiendo a medida que vas estando cada vez más suelto.

¿Es duro ser el absoluto protagonista de una serie en la que tiene que hacer además dos personajes? Solo le puedo decir que cuando llevábamos cuatro meses de grabación y 75 jornadas de trabajo, había grabado las 75 jornadas. Eso es inaudito dentro del panorama nacional de ficción. No creo que haya algún protagonista que trabaje de lunes a viernes todas las horas en todos los capítulos.

Pero no le maquillarán todos los días… No, cada semana hay tres días de Avelina y dos de Sergio, más o menos. Pero hay días que me toca hacer Avelina y después Sergio, o al revés.  Hemos tenido la suerte de que mi piel ha aguantado de momento el maquillaje, porque los propios maquilladores, con la experiencia que tienen, jamás habían aplicado un maquillaje así.

Le estarán pagando mucho por tanto esfuerzo, ¿no? Esto no es pagado con dinero.

¿Cuántas horas trabaja al día? Unas 14 o 15 horas. Me recogen a las cuatro o cinco de la mañana y llego a casa a las 10 de la noche para meterme en la cama. Uno de los valores de la serie radica en la producción. Hemos dado un salto cualitativo en la ficción nacional y aquí también se da en otro género como la comedia en que igual no se había producido. No sabíamos a qué nos enfrentábamos porque no se había hecho un personaje que requiriera este esfuerzo de caracterización. Encima nos ha tocado trabajar en verano, con los problemas que el calor plantea para el maquillaje. Ha habido días que lo hemos pasado muy mal.   

Mi piel ha aguantado de momento la cantidad de maquillaje que me ponen"

Usted toca la guitarra acústica con la banda Soundtrack. Le habrá hecho mucha gracia que en esta ficción su personaje también toque en un grupo… Esa es una de las cosas que más me gusta de la serie. Yo me subí antes a un escenario a tocar que a actuar. Lo hice con 15 años. Soundtrack es una banda en la que hacemos versiones, pero nos juntamos cuando podemos. Somos amigos de Murcia.

¿Qué tal con Rubén Cortada? Ya le conocía. Es la tercera serie que hago con Rubén. Lo que pasa es que tanto en El tiempo entre costuras como en Lo que escondían sus ojos no coincidimos en el rodaje por nuestros personajes. Pero nos caemos bien desde que nos conocimos en El tiempo entre costuras. Hubo buen feeling desde el principio, y ahora mucho más.

¿Qué poso le ha dejado el Goya? No he tenido tiempo de digerirlo y disfrutarlo. Que te den un premio así, que ni siquiera te planteas que algún día lo vas a recibir, es una cosa agradable. Uno no trabaja en esto pensando en que van a darle un premio. De repente verte subiendo a recoger uno, tenerlo ahí en casa y mirarlo de vez en cuando...

¿Dónde lo tiene? Encima de un altavoz, al lado de la tele y la chimenea. Lo planté allí el primer día como el que deja el móvil y ahí se ha quedado.