tú y yo somos tres

Un monstruo de 20 años

FERRAN MONEGAL

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Ha conseguidoPedro García Aguado, en el primer programa de la nueva temporada deHermano mayor (Cuatro) un espectáculo que seguro quePiquerasno habría dudado en calificar de¡es-ca-lo-frian-te!Efectivamente. Nos han mostrado, con toda suerte de detalle, la vida casi criminal de Rosana, joven y aguerrida moza de 20 años. ¡Ah! Dantesco espectáculo el que ha protagonizado esta muchacha. Su vida es una furia incontenible, una rabia animal que consiste en atacar continuamente a su madre, a su padre, a los perritos de la casa, a todo el que se mueve en aquel domicilio, incluido el presentadorGarcía Aguado,que también se ha llevado su ración de golpes y patadas. Y la madre de Rosana, impotente y absolutamente aterrada, iba diciendo a cámara:«Una vez un médico me dijo al ver la situación en que nos encontramos: 'Señora, usted es una muerte anunciada. Esta niña no tiene alma'». Nunca habíamos visto en televisión un espectáculo semejante. Y al final, después de queGarcía Aguadola llevase a combatir en un ring, como terapia de choque, parece queRosanaha cambiado. O sea, nos han querido demostrar que la tele ha ayudado. ¡Ah! Es la forma que tiene el programa, y la cadena, de justificarse. Pero no es justificable transformar en cafre entretenimiento, en espeluznante espectáculo, las terapias sobre enfermos graves. Ha conseguido, eso sí, este programa lo que seguramente han exigido los nuevos dueñostelecincosa su nueva cadena Cuatro: apretar el acelerador, impacto a tope, y ni ética ni estética de ninguna clase. Eso lo han bordado.

'EL MEU AVI' .-Gran alegría en casa: enNo me la puc treure del cap(TV-3) se han detenido en el popularísimo tema deOrtega MonasterioEl meu avi. Hombre, esta sí es una canción que todos tenemos en la cabeza. Si una habanera ha alcanzado una dimensión popular, incuestionable, esa esEl meu avi. Quizá intenta compensar este trabajo el sonrojante ejercicio publicitario que hicieron la semana pasada sobre La Trinca, con la excusa de recordarnosLa dansa del sabre, que es muy graciosa pero ni tiene rango popular ni está fijamente incrustada en el cerebro de nadie. ¡Ah! Comprendamos, no obstante, lo que pasa: en la nueva TV-3 que ahora alguien está diseñando, parece que la producción exterior va a ser colosal. Y, claro, hay que cuidar, incluso más que antes, a los fabulosos productores Cruz yMainat.