Alicia Sanz: «Soy tan cabezota como Lucía»

En la serie Gavilanes (A-3, 22.30), Alicia Sanz (Ceuta, 1988) interpreta a la caprichosa Lucía, la más pequeña de las hermanas Elizondo. En la vida real, la artista afirma ser muy diferente

-¿Cómo es Lucía Elizondo?

-Mi personaje es el de una chica pasional e independiente. Quiere ser libre y no le gusta que le digan lo que tiene que hacer. Está acostumbrada a que los chicos la persigan.

-¿Se identifica con ella?

-No, aunque no niego que hay algunos aspectos en que nos parecemos mucho: quizás en lo cabezota que es y en que cuando quiero una cosa me da igual lo que me cueste.

-Pero su personaje evolucionará en esta nueva temporada.

-Sí. Lucía va a madurar mucho, porque decidirá irse de casa y dejará de ser tan mimada y caprichosa. Ya no lo tendrá todo hecho, y eso va a ser muy complicado, porque se va a enfrentar a la responsabilidad.

-¿Qué es lo que más le gusta de la serie en estos nuevos capítulos?-Me encanta mi nueva casa, es magnífica, adoro los caballos y estar otra vez rodeada de este elenco tan maravilloso. Nos llevamos genial, pasamos muchísimas horas juntos en el tren y en el plató, en Barcelona.

-¿Qué tal le va con el catalán?-Practico, practico.

-Sí. Por la interpretación he tenido que dejar mi casa, a mis amigos y a mi familia, pero en cuanto puedo intento estar con ellos. Lo que pasa es que desde que era muy pequeñita iba a clases de baile y de canto. Y cuando tuve 18 años me pude ir al fin a Madrid. Comencé a estudiar Económicas, pero mi verdadera vocación es la actuación.

-¿Le fue difícil dejar a sus padres y su ciudad e irse a Madrid?

-¿Qué papel le gustaría interpretar?-Todos (risas).

-Este es un trabajo muy importante para usted. ¿Qué les recomendaría a los jóvenes que la admiran y quieren seguir sus pasos?-Les diría que se formen, que estudien, porque es muy importante para cualquier actividad. Hay que estar preparado para cuando llegue el momento de demostrar que sí sabes hacer las cosas.

-¿Qué cree que se necesita para ser un buen actor?-El actor nace, pero también se hace. Hay algo que viene desde la familia, la casa, pero no solo sirve tener talento, hay que desarrollarlo y reciclarse continuamente. Si no tienes constancia o no te esfuerzas, el talento no te sirve de nada.

-¿Qué le ha dejado como enseñanza el hecho de trabajar en televisión?-En una serie como esta, que el personaje va creciendo contigo. Es diferente al teatro o al cine, que ya sabes cómo termina.

-A ir al gimnasio y al cine o leer. Y a descansar, que mucha falta me hace.

-Son muchas horas de rodaje. ¿A qué se dedica cuando no trabaja?

Gavilanes?-Un chico muy cariñoso, entregado, apasionado y superbuena persona. Es lo que enamora a Lucía.

-Y, por último, ¿cómo es Frank (Alejandro Albarracín) en